Sergio Reinoso Vicente, de 36 años de edad y natural de Zaragoza, tuvo una larga trayectoria como jugador, la cual empezó en las categorías base del Casetas y siguió en diferentes equipos de Tercera, Regional Preferente y Primera Regional, además de varias experiencias fuera de nuestra comunidad autónoma: "Soy de Casetas y jugué allí durante mi etapa de fútbol base, luego lo hice en varios equipos de Tercera, Regional Preferente y Primera Regional, tanto en Aragón como fuera. Tengo un gran recuerdo de mi estancia en el Zamora, donde compartí vestuario con jugadores que habían sido profesionales, aprendí mucho". Su padre fue entrenador profesional y eso ayudó a que Sergio se decidiera a sentarse en los banquillos: "Me entró pronto el gusanillo de entrenar, quizás por la influencia de mi padre, que dirigió a equipos profesionales en Perú, su país de origen". Tras estar entrenando a equipos base en Casetas, decidió dar un paso más en su afición por dirigir: "En 1995 me saqué los carnets de entrenador, porque me gusta entrenar y es una forma de no cerrar ninguna puerta al progeso de uno mismo".
Tiene bastante experiencia en los banquillos: "Tras el Casetas, pasé por el Amistad y el Olivar, más tarde entrené al Pedrola y al Robres, este último en dos etapas, siendo la última el año pasado. Me cesaron con el equipo en mitad de la tabla, no me lo esperaba, fue duro". En la presente campaña está al frente del Oliver de Regional Preferente, donde se encuentra a gusto y respaldado por el entorno. "Estoy recibiendo un trato excepcional, me siento respaldado y con confianza para sacar el proyecto adelante".
Ahora mismo el equipo está en descenso, pero confía en que podrán salir de esta difícil situación: "La liga está muy igualada, las distancias en la clasificación son cortas. Tuvimos una racha muy buena de tres triunfos seguidos. Sin embargo, ahora llevamos cuatro derrotas consecutivas, debemos mejorar en algunos aspectos para ganar en regularidad. El equipo es joven y puede y va seguir progesando". La confección de la plantilla para la temporada actual fue un duro proceso: "Tenemos la gran dificultad de que los jugadores no cobran, lo que es un hándicap para traer jugadores y retener a aquellos que destacan. Únicamente continúan seis jugadores de la temporada pasada".
