Marcelino va a ser firme con los descartes y quiere que los jugadores que no cuenten con opciones de estar en la primera plantilla no realicen ninguno de los dos stages de pretemporada que tiene previsto organizar el nuevo entrenador zaragocista: "Yo creo que no deben de ir los que tenemos seguridad que no van a contar, no pueden estar con el grupo", aseveró el entrenador del Zaragoza, que no será tan inflexible con aquellos futbolistas cuya continuidad esté más en el aire: pendientes de una salida aunque los pueda considerar útiles para su proyecto en el caso de que se queden. Éstos harían la pretemporada, pero "lo mejor es intentar solucionar su futuro lo antes posible".

En la lista de descartes del entrenador zaragocista están jugadores como Juanfran, César Sánchez, Luccin o Pavón, mientras que a otros como Aimar o Matuzalem se les va a buscar una salida porque se considera que sus condiciones no son las mejores para Segunda, aunque en el caso del brasileño esa marcha solo sería en forma de cesión por una temporada, porque el club lo considera un activo importante en el caso de que se retorne a la élite. Y regresan tras su cesiones Longás (Tenerife) y Ewerthon (Stuutgart y Espanyol), sobre quienes debe decidir el técnico, aunque el brasileño no lo tendrá fácil y el canterano podría salir de nuevo cedido.

Marcelino vivió en el Racing el curso pasado cómo la configuración de gran parte de la plantilla se hizo en el tramo final y supo sacarle un gran rendimiento. Sin llegar a ese extremo, ya asume que el 15 de julio no va a tener el grupo cerrado, ni en las entradas ni en las salidas, donde situar en el mercado a jugadores que tienen fichas tan altas no va a ser sencilla. Y, además, resta por decidir el futuro de futbolistas como Sergio García, Oliveira o Milito, con los que cuenta el entrenador pero cuya cotización en el mercado es muy alta. Mientras, el adiós de Ayala también parece probable.

TRABAJAR CON LOS FIJOS Pero los descartes del técnico lo van a tener difícil si llegan a ese 15 de julio en la lista de la plantilla. Así, se quedarían en la Ciudad Deportiva. La primera concentración, que será desde el día siguiente hasta el 25 --Navaleno o Villalba--, arrancará sin ellos, porque el técnico quiere trabajar desde el inicio con un grupo que se aproxime lo más posible al que empezará la Liga en Segunda en busca del ascenso y ahí no tienen cabida los jugadores con los que no cuenta.

De momento, Luccin ya sabe que se tiene que buscar equipo y el interés más palpable es el del París Saint Germain, aunque el Olympique también ha sondeado al francés, que tiene una de las fichas más altas de la plantilla, ya que se acerca a los tres millones de euros. También César y Juanfran asumen como probable su salida --no se les ha dicho nada oficialmente aún--, aunque los dos tienen un año más de contrato. En el caso de Pavón, al que le quedan tres años más, su alto salario y su pobre rendimiento en la temporada pasada le sitúan en el disparadero, con el Olympiakos, que ya lo quiso el verano pasado, como un posible destino.