Es el hombre del momento. No hay secretos para David Villa (Tuilla, Langreo, 1981) con la portería rival a tiro en esta Eurocopa. España disfruta y se beneficia del estado de gracia de un futbolista nacido para el gol que nunca se resignó a partir como suplente, como apuntaban todos los indicios. Ya es el máximo goleador español en los grandes campeonatos. Suma siete tantos entre los conseguidos en el pasado Mundial y la presente Eurocopa y no quiere pararse ahí.

--"Villa maravilla" es la frase de moda. ¿No se siente abrumado por tanto elogio?

--Lo que más feliz me hace es que se hable de que España es una selección compacta y que puede llegar a la final. Creo que es posible porque esta selección está creciendo y todos estamos ahora mismo convencidos de que es posible. Individualmente, el hecho de que se digan tantas cosas buenas sobre mí es lo que menos me preocupa. Estoy muy centrado en el trabajo de cada día y no me distrae en absoluto todo lo que se ha organizado por mi buena racha.

--¿Cuál ha sido la clave para haber llegado a Austria en este estado de forma tan excepcional?

--Trabajar el día a día y sobre todo el hecho de haberme perdido muchos partidos este año por lesión en mi club. Por desgracia, a lo mejor no he podido ayudar al Valencia tanto como hubiese querido, pero ahora me encuentro fenomenal. Luego, gracias a que pude jugar muchos partidos seguidos en la Liga y en la Copa del Rey sin lesionarme y marcando muchos goles, cogí mucha confianza para venir aquí y alcanzar un estado de forma muy bueno.

--¿Se está sacando también toda la rabia acumulada por una temporada dramática en su club?

--No tiene nada que ver. Yo siempre juego para hacerlo lo mejor posible. Unas veces salen las cosas y otras no. Ahora parece que tengo el santo de cara y no cabe duda de que me satisface enormemente poder ayudar a que este equipo pueda dar el verdadero valor que tiene, que es muy grande.

--¿Qué pasaba por su cabeza cuando se le daba como suplente antes de empezar la competición, sobre todo a raíz del golpe que le propinó Puyol en un entrenamiento?

--El entrenador, que es el que hace las alineaciones, nunca me dio como suplente, que yo sepa. Por lo tanto, siempre he pensado en trabajar para jugar lo máximo posible. Lo del golpe de Carles no fue más que un accidente que afortunadamente solo me privó de disputar el amistoso contra Estados Unidos.

--Y por fin ha aparecido esa conexión con Torres que les ha convertido en la pareja atacante más desequilibrante del campeonato.

--No creo que esto sea exactamente así. Siempre hemos tenido una gran compenetración. En el Mundial de Alemania, jugando juntos, metimos tres goles cada uno. Luego, en la fase de clasificación para la Eurocopa, unas veces por lesiones suyas y otras por las mías, no hemos podido coincidir mucho en la selección, pero siempre hemos demostrado que nos llevamos bien dentro del campo y fuera de él y que podemos jugar juntos perfectamente y aprender mucho el uno del otro.

--Usted nunca da tregua a ningún defensor, como pueden atestiguar los centrales suecos. Su gol a Isaksson valió la segunda victoria y desató la celebración más intensa que se recuerda.

--Nadie se conformaba con el empate en ese partido. Todos estábamos pendientes de ganar, lo que pasa es que muchas veces se complica. Lo conseguimos a ultimísima hora y sirvió también para demostrar la unidad que hay en esta selección.

--Supongo que usted pensará que el mejor sistema para la selección española es en el que hay sitio para dos delanteros.

--El mejor sistema es el que decida el míster, que es el que más sabe de esto. Todos tenemos que acatar sus decisiones. Hasta ahora hemos ganado los dos partidos con este sistema y no creo que vaya a cambiar, pero es una decisión suya.

--Parece que contra Grecia, con el primer puesto asegurado, jugarán los suplentes, con lo que usted empezará en el banquillo, algo que no creo que le apetezca demasiado.

--Lo que me apetece es ayudar al seleccionador y a mis compañeros. Tengo que acatar las decisiones y trabajar por el bien de la selección, esté donde esté. Luis siempre ha buscado que antes de entrar al campo haya buenas relaciones fuera de él y lo ha conseguido. Todas las críticas a él y al equipo hicieron que nos juntásemos más y al final eso nos ha ayudado a venir aquí más unidos, más compactos como bloque y más confiados en nuestras posibilidades. Nuestra fuerza es el bloque, el conjunto, y todos vamos en la misma dirección.

--Además, parece que España tiene variantes para adaptarse a cualquier situación.

--Es que no es cosa de estos dos partidos. Hace mucho tiempo que venimos demostrando que este es un equipo con alternativas. No es fácil llevar 18 partidos sin perder.

--¿Resulta todo más fácil con jugadores como Xavi e Iniesta?

--Ven muy bien el fútbol, tienen un gran último pase y por lo tanto todo es más fácil con ellos. Con jugadores así es más fácil hacer goles porque te buscan muchos más huecos para finalizar.

--¿Le da tiempo a pensar en su futuro?

--Mi único futuro ahora es el día a día, estar como hasta ahora e incluso mejorar para llevar a España hasta el último día de la Eurocopa.

--¿Se considera usted imprescindible para el Valencia?

--El Valencia no ha dicho que soy imprescindible ni ha dejado de decirlo. Cuando me fui al acabar la Liga nadie me dijo nada. Yo tengo contrato y estoy tranquilo aquí.

--¿Le importaría compartir camiseta con Xavi, Iniesta y Puyol en el Barcelona?

--Estoy tranquilo aquí.