En Wimbledon el domingo intermedio del torneo está dedicado al descanso. No hay tenis. El All England está cerrado por tradición. Solo en tres ocasiones en las 122 ediciones que se lleva jugando los organizadores se han visto obligados a abrir las puertas para disputar partidos por culpa de la lluvia. Ni el año pasado, que llovió durante los cinco primeros días, se jugó a pesar de las quejas que emitieron muchos de los tenistas.

The middle sunday lo han bautizado los ingleses. Es el único de los cuatro torneos del Grand Slam que tiene esta regla, en los demás no hay descanso e incluso en Roland Garros se adelanta el torneo para jugar tres domingos, por una cuestión puramente económica. Wimbledon se ufana de ser un torneo de club, uno de los pocos lugares donde la publicidad apenas se aprecia en las pistas y en el que los tenistas aún visten de blanco de manera obligatorio. La única concesión histórica ha sido jugar la final el domingo por la presión de las televisiones y construir un techo corredizo en la central que se estrenará el próximo año, cara a los Juegos del 2012.

Recuperar fuerzas

Este parón obligado tiene sus ventajas. Hoy es un buen día para la reflexión, para recuperar fuerzas y para afrontar la batalla final. La carrera hacia el título que comenzará hoy con la disputa de todos los partidos de octavos de final en categoría masculina y femenina. En eso también es el único Grand Slam que ofrece un programa de lunes tan apasionante. Quienes tengan acceso a Wimbledon podrán asistir a una espectacular jornada de tenis. Los 32 mejores tenistas (hombres y mujeres) que se han salvado de la criba de la primera semana presentan su candidatura al título.

Entre esos aspirantes estarán Rafael Nadal, Feliciano López y Fernando Verdasco. Ayer los tres estuvieron en las pistas de entrenamiento de Aorangi Park para preparar sus duelos ante Mijail Youhzny (número 17 del mundo), Marcos Baghdatis (25) y Mario Ancic (37), respectivamente.

Nadal realizó ayer un ligero entrenamiento de una hora con el serbio Janko Tipsarevic, que puede ser su posible rival en las semifinales. El número dos del mundo pasó el resto del día relajado en la casa de Wimbledon antes de ver con todo su grupo la final de la Eurocopa. "Ahí sí que estaré nervioso", aseguró el tenista mallorquín. Antes comió unos espaguetis con gambas y calabacín que le tocó cocinar a Benito Pérez Barbadillo, su jefe de prensa, y luego, antes de ver a España, se relajó jugando a la playstation.

Hoy Nadal jugará ante Youzhny, en el segundo turno de la pista 1 (no antes de las 15.00 horas, Canal+). "No será fácil. Juega muy agresivo. Habrá que evitar que coja la iniciativa", decía ayer el español. El año pasado en Wimbledon el tenista ruso le forzó a los cinco sets y este año le infligió un duro correctivo en la final de Chennai (6-0, 6-1) que Rafa Nadal aún no ha olvidado.

Verdasco y López jugarán en pistas exteriores, más pequeñas e incómodas. Tanto Ancic como Baghdatis les han ganado la única vez que han jugado. El croata venció a Verdasco hace dos semanas en Queen´s y el chipriota a López en Doha, a principios de año. Pero tanto Verdasco como López eran optimistas cara a sus opciones. Los dos han hecho una excelente primera semana y han tenido en el servicio su mejor aliado, especialmente Feliciano, que lidera la clasificación del torneo con 68 aces por delante de Ancic con 59.