Despertó mucha expectación el partido que enfrentó en la mañana de ayer a dos de los equipos grandes de la Tercera División. Casi setecientas personas se dieron cita en la Ciudad Deportiva para presenciar un choque que no defraudó.

Lo único que sobró fue el fuerte viento, que deslució un tanto el buen fútbol que ambos equipos llevan dentro e hizo posible que los equipos tuvieran más posesión del esférico cuando lo tuvieron a favor. Debido a ésto, cada conjujnto dominó en un tiempo, siendo el conjunto local el que lo tuvo a favor en el primer periodo.

Tras unos minutos sin ocasiones, con un La Muela dominador ante un Ejea un tanto reservón, llegó el minuto 15 y Riaño botó una falta desde una distancia lejana, el balón fue hacia el área ejeana y allí el más listo fue Bel que con un buen testarazo. Los siguientes minutos fueron de acoso territorial de los locales, que buscaron un segundo tanto que les diera más tranquilidad de cara a la segunda parte. Pero el Ejea se defendió bien y no pasó por excesivos apuros, no habiendo practicamente jugadas de peligro, ni en balones aéreos ni en jugadas combinativas. Los visitantes intentaron salir a la contra, pero fueron bien controlados y no crearon ningún peligro.

CAMBIAN LAS TORNAS En la reanudación, fue el Ejea el que se vio favorecido por la climatología, contando con el aire a favor, y se fue desde el principio en busca del tanto del empate. Los jugadores locales intentaron defenderse y buscar en un contragolpe un segundo gol que pusiera las cosas más claras. Sin embargo, el cuadro cincovillés tardó poco en conseguir su objetivo: Fue una buena combinación que acabó con un pase al punto de penalti donde se encotraba Eneko, que no perdonó y batió con facilidad a Manel.

Con tanto tiempo por delante podía pasar cualquier cosa, La Muela luchaba contra el viento e intentaba llegar a los dominios ejeanos a base de rasear el esférico y con muchos apoyos, pero no llegó a acercarse demasiado a la meta ejeana. Por su parte, los blanquiazules tuvieron más dominio aunque tampoco sus aproximaciones fueron peligrosas.

Fue en el tramo final del choque cuando pudo marcar el Ejea y llevarse los tres puntos. Primero fue un balón que se marchó fuera en una buena ocasión visitante, siendo después el goleador ejeano Diego Gómez el que dispuso de la mejor ocasión para que su equipo se llevara los tres puntos, pero el poste escupió el balón tras su disparo. Al final, un empate que puede considerarse justo y un La Muela que terminará el año en el feudo del Andorra en otro gran partido.