Una decisión sin precedentes ha agitado el mundo de las quinielas. La intoxicación alimenticia de 13 jugadores del Murcia durante la cena de despedida del destituido Javier Clemente obligó a suspender el partido ante el Celta del pasado domingo. El encuentro figuraba en la casilla 11 de la quiniela de la jornada. ¿Solución? Desde hace unos años no hay partidos de reserva. Tampoco se aplica el sorteo, vigente la pasada temporada. El Organismo Nacional de Loterías y Apuestas del Estado, según la norma 38.B.1, decidió eliminar el encuentro. Los acertantes de 13 y el pleno 15 cobran como si tuvieran 15, mientras que el resto se queda igual, independientemente del pronóstico de La Condomina.

Indignación total

La quiniela se quedó sin acertantes de 14 y los fondos se distribuyeron de forma diferente para los acertantes de 13, 12, 11 y 10 para compensar la ausencia del 14. "Es una chapuza, un disparate. Con los partidos reservas no había problemas. El sorteo ya me parecía mal, pero esto no tiene perdón", asegura Ricardo Pastor, que no ha visto nada igual en más de medio siglo de experiencia con las quinielas. "No entiendo cómo no se puede avisar y prevenir esto. Cada año puede haber circunstancias así".

Pastor no fue el único que se sorprendió. Eduardo Losilla, que cuenta con cientos de peñas por toda España, estaba ayer alucinado. El ajetreo le pilló por sorpresa. "Es una pasada lo que ha ocurrido. Llevo 43 años haciendo quinielas y no había visto nada igual. Si me sorprende a mí, que llevo toda la vida en esto, es normal que todo el mundo esté indignado". Su teléfono no paró de sonar en todo el día. Todos le decían que se había equivocado en el escrutinio. "La gente se cree que les timas. Y encima en alguna televisión ponían una ´X´ en el partido. Ha sido una locura. Es una norma sin pies ni cabeza. Menos mal que la quiniela no era muy complicada. Si no, esto hubiera acabado en los tribunales", comenta Losilla, que también pide un poco de calma: "Es un error clamoroso que no haya 14 signos, pero la gente debe entender que, en una quiniela así, este 13 no se hubiera pagado a 3.700 euros sin esta suspensión", indica Eduardo Losilla.

Reclamaciones y denuncias

Las quejas eran constantes ayer en las administraciones. Muchos apostantes se negaron a cobrar. Basta ponerse en la piel de alguien con 13 aciertos y un triple en el Murcia-Celta. Otro caso flagrante es el de Candado, un ciudadano de Santa Coloma de Gramenet, quien asegura que hubiese multiplicado sus beneficios si hubiera valido el partido. "Es una canallada. Me han estafado 4.500 euros, es inadmisible. Este es un país de pillos y maleantes. No voy a permitir que el Estado se quede con mi dinero".

Según sus cuentas, el boleto actual le supone 190 euros por los 12, 11 y 10. Si el Murcia-Celta se hubiera contabilizado (tenía un triple en la combinada), hubiese cobrado 4.500. "Si yo me gasto el dinero en tener un resultado más fijo, ¿de qué me sirve si anulan un partido?", se pregunta el apostante, que no descarta poner el caso en manos de los abogados para cursar la denuncia pertinente contra el patronato estatal.