Rubén Pulido continuó ayer su trabajo en solitario con la intención de poder llegar al partido ante el Sporting. El defensa, que sufrió una elongación en el bíceps femoral del muslo derecho en Valladolid, realizó carrera continua y trabajó con los fisioterapeutas, aunque la prueba definitiva no se le realizará hasta mañana. Ponzio y Babic ocuparían los laterales si no se recupera.