Ya lo adelantó Agapito Iglesias en Navaleno el pasado sábado: "Leo Franco está cerrado y, a comienzos de la próxima semana, se incorporará al grupo". Dicho y hecho. El meta argentino aterrizó ayer en la Estación Delicias de la capital aragonesa a las 19.47 horas en un AVE procedente de Barcelona y, aunque declaró sentirse "bastante cansado" por el largo desplazamiento, expresó su ilusión por volver a España. "Llevo casi un día de viaje, pero tenía muchas ganas por regresar y de empezar a trabajar con mis compañeros".

El portero de 33 años se ha comprometido con el Real Zaragoza por dos temporadas con opción a una tercera y se espera que hoy pase el reconocimiento médico y sea presentado de forma oficial en La Romareda. Del mismo modo, por la tarde viajará hasta el hotel de concentración de San Lorenzo de Yagüe para reunirse con el resto de sus compañeros.

Desde un principio, la cuestión económica fue el principal problema para el cierre de la operación, aunque la semana pasada el portero alcanzó ya un acuerdo para firmar un contrato con el Zaragoza y su fichaje se retrasó porque Franco tuvo que desvincularse del Galatasaray para formalizar ese compromiso. Al argentino, que ya había iniciado la pretemporada con el Galatasaray, la directiva del cuadro turco ya le había manifestado que no iba a contar con sus servicios y, al final, ambas partes estaban condenadas a entenderse.

Franco percibirá en el Zaragoza un contrato bastante menor que en el Galatasaray. En Turquía cobraba una ficha de 2,5 millones de euros brutos y en el cuadro aragonés percibiría por ese concepto 1,3 millones. Con la llegada del argentino y la presencia de Toni Doblas, la portería del Zaragoza está cerrada. El club se había fijado sobre todo en Jacobo (Valladolid), pero la posibilidad de fichar a Leo Franco hizo que se retirara de la puja por el guardameta del cuadro vallisoletano.

Ahora, el club cuenta con 24 jugadores con contrato en vigor, a los que habría que añadir las dos o tres incorporaciones que según apuntó Agapito el sábado en Navaleno todavía deben producirse para terminar de perfilar la plantilla del curso 2010-2011. Sin Arizmendi, traspasado al Getafe, ni De Barros, en diálogo con el Xerez, todavía deben abandonar la disciplina aragonesa entre cuatro y seis futbolistas más.