Hasta ahora las iras de los seguidores del Real Zaragoza por el mal comienzo de Liga que está realizando el equipo en la actual temporada se han dirigido hacia el palco y principalmente se han centrado en la persona de Agapito Iglesias, presidente y accionista mayoritario de la entidad zaragocista. La fractura entre los dirigentes del club aragonés y la afición es total y queda patente en cada partido que se disputa en el estadio de La Romareda, pero en cualquier momento la grada puede empezar a mirar también hacia el césped si los resultados no mejoran de inmediato.

De repente los jugadores se pueden quedar sin el paraguas de Agapito y empezar a cargar con la parte de culpa que les corresponde por tener al Zaragoza como colista en solitario de Primera División. "Esto ha sido así durante estos partidos, pero a partir de ahora como el equipo no empiece a ganar creo que el paraguas se va a cerrar y que los gritos y los insultos van a empezar a dirigirse hacia a nosotros. Por eso ahora más que nunca tenemos que estar unidos y empezar a ganar partidos para que la gente vea que el equipo está implicado", comentaba ayer Gabi en el programa de deportes de la SER.

Máxima responsabilidad

El capitán afirmó que "los jugadores tenemos la máxima responsabilidad y la máxima culpa de todo esto, porque somos los que salimos al campo, pero también hay otros factores que importan. Tenemos que saber lo que debemos hacer y sentir el apoyo de todo el mundo". Precisamente lo que más han tenido hasta ahora ha sido el apoyo de la afición, pero algo tendrán que poner ellos de su parte.