En la semana en la que el CAI Zaragoza cerró el fichaje de Carlos Cabezas, un base campeón del mundo, Sam Van Rossom dio otro paso al frente con un partido sobrio, dirigiendo y anotando, y convirtiéndose en protagonista al anotar la canasta final, la de la victoria. "He tenido suerte y el balón ha entrado, no tiene importancia. Pero bueno, hemos ganado y eso es lo importante", dijo Van Rossom al término del encuentro con la tranquilidad del que ha cumplido con su trabajo, sin más.

El CAI Zaragoza completó un brillante encuentro y se llevó un triunfo histórico del Palau. "Si vienes a jugar a Barcelona y vences así, es un día extraordinario. Me lo he pasado bien, ha sido un día especial porque no todo el mundo tiene la suerte de empezar así, pero creo que he jugado un buen partido y he ahí el resultado", explicó el jugador con la misma sonrisa con la que terminó el encuentro y fue abrazado por un saltarín Phillip en el mismo escenario de la gesta.

Pero Van Rossom no pierde la calma ni por una victoria como la de ayer. "Las sensaciones no nos deben confundir ahora. Debemos mantener los pies en el suelo y seguir trabajando", indicó el base belga huyendo de la euforia después de que su equipo sumara un importante triunfo, el segundo en cuatro jornadas. Van Rossom jugó casi media hora sumando 10 puntos, tres rebotes y cinco asistencias para terminar con 10 de valoración. Aunque la imagen es la de su canasta desde la esquina, la que certificó la gesta.

El CAI Zaragoza regresará el martes al trabajo para preparar una nueva jornada de Liga. El próximo domingo, en la quinta fecha de la ACB, visitará el Príncipe Felipe el Cajasol de Sevilla a partir de las 12.15 horas.