Sin llegar a justificar la convocatoria de huelga para las dos primeras jornadas de Liga por parte de la AFE, hay clubs que comprenden la postura de fuerza del sindicato de futbolistas. Es el caso del Villarreal, uno de los más saneados del fútbol profesional, cuyo presidente, Fernando Roig, no dudó en reconocer que la ley concursal está perjudicando mucho al fútbol y es la causa principal de que se haya llegado a esta tensa situación.

"Que haya más de 20 equipos europeos en concurso de acreedores y que todos, menos uno, sean de la Liga española es una vergüenza. Antes descendías si no pagabas y ahora no pasa nada", dijo el dirigente del club levantino, que tiene muy claro el camino a seguir: "El que no paga debe descender y los jugadores quedar libres. Esos dos condicionantes tendrían que ser claves para la nueva ley", aseguró.

PERJUDICADOS Roig, pese a todo, se mostró en contra de la huelga, lo mismo que José María del Nido, presidente del Sevilla, para quien la Liga no es culpable de la ruptura y "los futbolistas serán los principales perjudicados porque son los que más tienen que perder si todo se viene abajo".

La AFE, sin embargo, recibió ayer el respaldo de Comisiones Obreras, que destacó que el sindicato de futbolistas "pretende proteger de manera fundamental los derechos de los futbolistas más modestos" y "debe ser corregido el abusivo uso fraudulento de la Ley Concursal".

La decisión de la AFE también obtuvo el respaldo incondicional de la Asociación Nacional de Entrenadores (ANEF). "La huelga programada por la AFE para las dos primeras jornadas de Liga no debe ser entendida como una medida de coacción, sino una más que justa y razonable reivindicación de lograr que cesen los continuos incumplimientos por parte de algunos clubs a la hora de pagar sus salarios y de los que no nos encontramos al margen los entrenadores", dicen.