Los deportes de aventura

Una carrera al paraíso

El paradisíaco Ibón de Plan alberga este domingo una nueva competición vertical Organizada por el CA Sobrarbe, la nueva prueba se integra en la Copa Aragonesa

R. MARTÍ

Si hicieran una encuesta entre los amantes aragoneses de la naturaleza, con toda seguridad el lugar elegido por su belleza, su espectacularidad y por las leyendas que les rodean sería el Ibón de Plan o de la Basa de la Mora. Su paisaje es lo más parecido a las lejanas Montañas Rocosas Canadienses. Un circo casi a 2.000 metros de altitud en el fondo del cual reposan las aguas tranquilas de un lago. En sus orillas las praderas se mezclan con los pinos negros. Hacia arriba el paisaje desértico de pedrizas lo corona el espectacular macizo calcáreo de Cotiella, que por poquito no alcanza los tresmil metros de altitud.

Es en este idílico lugar donde Alberto Bosque y Vicente Gutiérrez, unos componentes del Club Atletismo de Sobrarbe, han tenido la idea de diseñar una carrera de montaña. En poco tiempo se pusieron manos a obra y han conseguido que el próximo domingo se dispute la primera edición de la Subida al Ibón de Plan. Prueba del respaldo que le ha dado la Federación Aragonesa de Montañismo es que la ha incluido inmediatamente en la Copa Aragonesa de Carreras Verticales, que comenzó en Oturia el 21 de abril y se cierra en Panticosa en el mes de julio.

Alberto Bosque nació en Zaragoza, pero lleva 26 años viviendo en Plan. "Vine para trabajar en los servicios sociales de la zona. Ahora trabajo en la biblioteca del Ayuntamiento de Plan", explica. Después de tantos años viviendo en Plan, Bosque se considera, además de montañero, montañés por convicción. "He hecho montaña toda la vida. Salgo todos los días a entrenarme por el monte con Gutiérrez. Un día fuimos al Ibón de Plan corriendo. Vimos que era un recorrido superbonito y se lo propusimos a la territorial. Les pareció magnífico", explica Bosque.

Colaboradores

Junto al Club Atletismo Barbastro, la carrera cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Plan y el Centro de Iniciativas Turísticas de la Bal de Chistau. La prueba se inicia en la localidad aragonesa de Plan, situada en el salvaje valle de Chistau. Se arranca en el punto kilométrico dos de la pista forestal de La Bergada. Tiene un desnivel positivo de 950 metros y acaba en la cota de los 1.916 metros, a las orillas del Ibón de la Basa de la Mora. La distancia es de cuatro kilómetros y la pendiente media, del 23%. Se espera la presencia de un centenar de participantes en la salida que tendrá lugar este domingo en Plan a las diez de la mañana.

Los atletas tendrán una pista de calentamiento y saldrán contrarreloj cada 30 segundos. La subida es muy mantenida y será complicado que puedan ir corriendo. Se asciende por un barranco por el que trepa un sendero de pequeño recorrido (PR HU-87), con señales de color blanco y amarillo. Después le sucede el sendero de gran recorrido rojo (GR-15) y los participantes terminarán la porción de subida en el refugio de Lavasar. "Es un sendero de montaña bien definido y discurre por un frondoso bosque junto al barranco que proviene del Ibón de Plan. Por dos puntos hay que cruzar el barranco y no existen pasos especialmente peligrosos. Hemos cortado árboles que se cayeron este año y ponemos de vez en cuando una cinteteta para reforzar la señalización", explica Alberto Bosque. Tras el duro ascenso solo quedará superar la planicie que lleva a la línea de meta.

Lo más complicado de la carrera a nivel organizativo será el cronometraje. "No hay luz en el ibón y tampoco cobertura de móvil. No se puede montar el sistema chip para medir los tiempos. Hay que coordinar bien el tema del cronometraje. Tenemos dos emisoras, una en la salida y otra en la llegada. Una tercera está colocada en el refugio de Lavasar".

El Club Atletismo Barbastro está muy implantado. Cuenta con 600 socios en una comarca con 6.000 habitantes. "Este club es una institución en estas tierras. Junto a esta cronoescalada, también organiza la Ultra Trail Sobrarbe, que se disputa en junio. El recorrido varía y da la vuelta a la Peña Montañesa. Tiene 75 kilómetros y 4.000 metros de desnivel positivo. Ya hay apuntados 500 corredores y se espera un gran éxito", explica Bosque.

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