Los jugadores del Real Zaragoza abandonaron ayer el estadio Ramón Sánchez Pizjuán cabizbajos y con sensación de impotencia después de haber sufrido una nueva derrota ante el Sevilla. "Se nos van los partidos y no levantamos cabeza. Lo único bueno es que los de abajo nos dan margen, pero no podemos seguir así. Estamos cabizbajos, pero no podemos bajar los brazos. Después del parón del próximo fin de semana nos vendrá el Real Madrid y tendremos que salir a ganar, porque no nos queda otra. Solo pensamos en ir partido a partido", afirmó Paco Montañés. Pese a la mala situación del equipo, Montañés añadió: "Nosotros estamos a muerte con el entrenador y él con nosotros. No nos queda otra que trabajar al máximo para tratar de salir adelante".

Víctor Rodríguez aseguró que "estamos dolidos y fastidiados por la derrota, porque no hemos podido cambiar nada y la dinámica sigue igual. Tampoco ha podido ser aquí y hay que levantarse para seguir peleando". El joven futbolista no quiso ni hablar de posibles errores arbitrales en contra del Zaragoza en el encuentro de ayer. "Lo que debemos hacer es mirarnos a nosotros mismos y dar todos un poco más para sacar al equipo adelante. No valen las excusas. Ahora tenemos un parón en la Liga y hay que preparar lo mejor posible el partido contra el Real Madrid. Nosotros no podemos dar ningún partido por perdido".

DARLO TODO También hizo declaraciones muy similares José Mari. "La situación es la que estamos no es ni muchos menos para estar tranquilos. Debemos trabajar mucho para intentar lograr ya un triunfo ante el Real Madrid", dijo el centrocampista andaluz, quien quiso mandar a la afición un mensaje de calma. "Lo único que podemos decirle a la afición es que vamos a darlo todo para intentar cambiar las cosas. Nos duele mucho la derrota y la dinámica negativa que llevamos, pero tenemos partidos para sacar el equipo adelante. Ahora hay que seguir remando todos en la misma dirección y estar muy unidos", comentó José Mari.