"Somos un equipo competitivo y no tengo ninguna duda de que vamos a sacar esto adelante. A ese carro nos vamos a montar todos, va a tener cabida todo el mundo", dijo Manolo Jiménez tras la goleada encajada ayer por el Real Zaragoza en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán. De este modo, el Zaragoza sigue sin ganar en el 2013. "Hay responsabilidad. Me preocuparía que no tuviera ganas de trabajar y que los jugadores no estuvieran conmigo", afirmó el técnico.

Para Jiménez la derrota ante al Sevilla no cambia "nada". Por ese motivo, añadió: "Es una jornada más sin ganar. Antes del parón de Navidad éramos uno de los equipos revelación de la Liga, con la plantilla que teníamos, y después ha salido todo mal. Esperemos que este parón (el próximo fin de semana no hay Liga) sirva para volver a ser el buen Zaragoza que éramos antes".

El técnico zaragocista aseguró que ayer todo se torció a raíz del primer gol rival. "Empezamos con buena onda, con once, porque que el Sevilla no estaba siendo superior once contra once, pero aprovecharon un error nuestro y a partir de ahí el Sevilla nos ha pasado por encima. Si es difícil para el Real Zaragoza estando con once se puede imaginar con diez", dijo Manolo Jiménez.

También admitió que el Zaragoza no había jugado bien, pero a la vez se quejó de la actuación arbitral. "Hemos fallado mucho, eso es innegable y no tiene la culpa nadie. Pero con el 0-0 ha habido un penalti claro a Postiga y la primera tarjeta a Babovic ha sido injusta porque no ha sido el que ha cortado la jugada. Hemos jugado un partido muy corto ante un gran equipo", explicó.

Y sobre la ausencia del once de Rochina dijo: "A Rochina tenemos que exigirle mucho más, tiene que dar más, no se puede justificar con dos disparos a puerta en un partido. Además, Víctor y Montañés se han entrenado bien y han hecho méritos para jugar".