"Yo me entreno para tratar de servir al equipo y jugar. Por eso primero espero estar yo en el equipo y con el que me toque a mi lado, bienvenido sea", afirmó ayer Mario Paglialunga, que hasta el momento es el único jugador fijo de Paco Herrera en el centro del campo. Paglialunga, a quien Herrera solo ha dejado fuera en el partido de Copa en campo del Alavés, reconoció que ante el Tenerife rindió mejor de lo que lo había hecho en anteriores encuentros. "Me sentí bien y creo que pude darle equilibrio al equipo, pero a ello también ayuda la actitud del equipo. Tengo mucho para dar. Es cierto que en el primer tiempo no lo hicimos muy bien, pero salimos con otra actitud y no tardamos tanto en arrancar. El primer gol nos ayudó mucho", dijo el futbolista argentino.

Mario Paglialunga confía en que la goleada conseguida frente al Tenerife (3-0) sirva para que el Zaragoza pueda arrancar definitivamente en la Liga de Segunda División. "Este triunfo debe acentuar todavía más nuestras ganas de seguir creciendo, pero solo hemos ganado un partido y hay mucho para mejorar. Esta semana va a ser más tranquila, pero hay que trabajar y apretar los dientes porque ahora tenemos que ganar en campo del Castilla", comentó el centrocampista.

Además, Paglialunga pidió mesura, porque ni antes eran los peores ni ahora son tampoco los mejores. "Hay que tener siempre una línea media y ser muy humildes. Ojalá que este sea el inicio de una buena racha de puntos para poder situarnos en la parte de arriba de la tabla, que es donde todos queremos estar. Esto es muy largo y habrá que ser pacientes para hacer las cosas cada vez mejor", dijo el jugador argentino.