La derrota fue la peor noticia del estreno del CAI Zaragoza en la temporada ACB. El inesperado traspiés ocultó el resto, también el esperanzador debut de Rasko Katic con su nueva camiseta. El pívot serbio, recambio del lesionado Shermadini, a su vez recambio de Vladimir Veremeenko, firmó 10 puntos y 4 rebotes en 18 minutos de juego, una hoja de servicios notable, insuficiente sin embargo para él ante el mal resultado colectivo. "El último partido me salió bien pero perdimos, así que no puedo decir que fuera un buen partido. Cuando ganemos podré calificarlo como un buen encuentro. Hasta entonces, no", reflexiona.

El cinco no quiso desvelar de lo que se habló en el vestuario después de perder contra el Joventut, pero cree que el problema fue que muchos jugadores estaban "cansados. Al tratarse de un primer partido --continuó--, todos quieren demostrar lo que pueden aportar y eso hace que el rendimiento no sea el esperado". Katic lleva en Zaragoza una semana, pero se atreve a calificar la plantilla del CAI como buena. "Todo lo que he podido ver es que la gente es realmente buena, alrededor del club y por supuesto los jugadores. Tenemos un gran grupo. Si cuentas con un grupo así se puede hacer un gran equipo, pero ahora tenemos que demostrarlo", exige.

LA GRADA El primer momento para hacerlo, este próximo domingo a partir de las 13.30 horas en La Laguna contra el Iberostar Tenerife, primera fecha para intentar resarcirse de la primera derrota. "Espero que volvamos de allí con la victoria y vayamos por el buen camino", desea. El número 14 del CAI también se muestra encantado con el ambiente que vivió por primera vez en el pabellón Príncipe Felipe.

"Sé que no es lo mejor hablar de mí, pero soy consciente de que en todos los equipos en los que he estado al público le gusta mi juego porque lucho y juego duro. Eso la gente lo agradece. Además me gusta porque aquí viene mucha gente, el pabellón está lleno, viven el baloncesto y eso es realmente bueno", afirma Katic, que pronto se metió a la afición en el bolsillo por su estilo de baloncesto: agresivo, peleón y guerrero. Un perfil de jugador que el CAI no había tenido a lo largo de estos años en ACB.