La Vuelta 2015 retoma este viernes una jornada con cierta exigencia en el recorrido, 177 kilómetros entre las localidades aragonesas de Calatayud y Tarazona, antes de la llegada de la alta montaña el fin de semana en tierras cántabras y asturianas.
Será una decimotercera etapa 'rompepiernas' con tres puertos puntuables y, según el libro de ruta, alguna más subida que probará las fuerzas y la ambición de los corredores. Como el repecho final, ajustado a velocistas tan potentes como rápidos.
Aunque esos especialistas, que bien podrían estar personificados en la figura de John Degenkolb, que hoy ha vuelto a fallar en Lleida, deberán trabajar lo suyo para llegar por delante a la meta.
No en vano deberán superar, entre otros, el Alto de Beratón, de Primera Categoría. Casi 11 kilómetros de ascenso al 4,7 por ciento y 520 metros de desnivel total, si bien a más de cien kilómetros de meta.
Más cercano al momento que se presume definitivo, a unos 32 kilómetros de la llegada, se encuentra el Alto del Moncayo, de Tercera, donde más problemas que la propia subida puede dar el viento que regularmente le azota.
Otro tercera, el Alto Collado de Asejo, que sirve de aperitivo a la ascensión al Beratón en una primera parte de la etapa más quebrada que la segunda, completa la nómina de subidas puntuables de la jornada.
Decimotercera etapa (Calatayud-Tarazona, 177 kms.)
Puertos puntuables:
Alto Collado de Oseja (3a categoría, km.53,6). - 8,2 kms. al 3,7 por ciento. Desnivel: 305 metros.
Alto de Beratón (1a categoría, km.71,9). - 10,9 kms. al 4,7 por ciento. Desnivel: 520 metros.
Alto de Moncayo (3a categoría, km.143,5). - 8,5 kms. al 4,5 por ciento. Desnivel: 390 metros.
