Con la presencia de 511 personas en la segunda convocatoria (93 en la primera) de los más de 4.000 citados a laAssemblea de Compromisaris ha comenzado la cita anual en la que la junta directiva del Barçapasa cuentas antes sus socios. Y ha comenzado con el informe deJosep Maria Bartomeu, el presidente, que ha dedicado sus primeras palabras a reivindicar la presencia de banderas'estelades' en el Camp Nou y allí donde se citen los aficionados azulgranas.

"Parecen épocas pasadas", ha dicho, antes de dar paso a un vídeo y ejemplificar la protesta del club a la sanción de la UEFA por atentar "al derecho de la libertad de expresión".

"La UEFA se ha metido en un buen lío", ha dicho el dirigente azulgrana, subrayando que la 'estelada' es un símbolo que no fomenta la violencia, no está prohibido y representa un sentimientoidentitario legítimo de barcelonistas y catalanes". Bartomeu ha informado que un socio ha abierto una iniciativa para denunciar a la UEFA en la justicia ordinaria, invitando a los compromisarios a sumarse a ella. El club no puede hacerlo por la posibilidad de represalias, más represalias, de la UEFA y la FIFA.

El informe de Bartomeu ha cantado las excelencias de la trayectoria del club, no solo deportiva (el triplete y los 19 títulos de las secciones), sino patrimonial y económica. El presidente reconoció que no se había podido mantener "el ratio de endeudamiento" y lo ha achacado a la sanción de la FIFA, "que nos obligó a fichar en un año lo que pensábamos hacer en dos".

Bartomeu ha trazado un futuro venturoso en el que el Barça mantendrá su liderazgo. Y, como tal, deberá "evolucionar" y "buscar soluciones sorprendentes y creativas" en un entorno competitivo "y a veces hostil".

El dirigente no ha eludido el fracaso de las negociaciones conCatar. Las negociaciones no han llegado a buen puerto. Bartomeu ha adelantado que "los puentes siguen tendidos" y las negociaciones con "Qatar Airways" continuarán, como si no existiera otra alternativa. El discurso de Bartomeu ha concluido con un mensaje de apoyo a Johan Cruyff y su familia por el cáncer de pulmón que le ha sido diagnosticado.