Jaime Romero ya ha recuperado el Maserati Gran Turismo por el que denunció por impago tras venderlo a otro particular y después de no recibir la cantidad que estaba fijada en la transacción, algo más de 70.000 euros. El futbolista puso hace una semana la correspondiente denuncia en una comisaría de la Policía Nacional en Albacete, donde el jugador hace la rehabilitación de su grave lesión de rodilla, y el caso se cerró a los pocos días, ya que el comprador tuvo que devolver el automóvil, que estaba en Sevilla, al extremo manchego, que ya vuelve a tener ese Maserati Gran Turismo.

El futbolista adquirió ese automóvil antes de fichar por el Zaragoza en el verano del 2014, pero decidió hace poco ponerlo a la venta y llegó a un acuerdo con otro particular, que reside en la capital andaluza. Al pasar los días y no producirse el pago fijado entre ambos, al futbolista albaceteño no le quedó más remedio que presentar la pertinente denuncia y al final ha recuperado su vehículo.

El precio del mismo, aunque pueda parecer elevado para un coche de segunda mano, no lo es tanto, teniendo en cuenta que el precio del Maserati Gran Turismo comprado en el concesionario está fijado en un mínimo de 131.000 euros.

RECUPERACIÓN

Jaime va a estar hasta finales de noviembre en Albacete trabajando en la rehabilitación de la lesión de rodilla que sufrió ante el Alavés. Después, el club italiano quiere que prosiga su recuperación en Udine y el jugador prefiere hacerlo en Zaragoza, aunque es posible que haga parte en tierras italianas y la recta final en la capital aragonesa.

El futbolista llegó cedido al Zaragoza en el verano del 2014 y, tras una primera temporada donde su rendimiento fue notable, con 28 partidos jugados y siete goles, el club decidió volver a negociar con el Udinese una nueva cesión, por la que tuvo que pagar más parte del salario del jugador que asumió la temporada pasada. Los dos clubs llegaron a un acuerdo a mediados de agosto y Jaime comenzó la temporada como suplente en los dos primeros partidos, ante el Mirandés y el Almería, pero no tardó en ser titular desde la tercera jornada. Sin embargo, la grave lesión en la rodilla en una acción fortuita ante el Alavés truncó una de las principales apuestas que había hecho el Zaragoza para luchar por el ascenso esta temporada.