Inició la Eurocopa como una de las cinco primeras favoritas al título, pero su fiasco en el debut ante Italia (2-0) supuso un bajón en Bélgica, esa selección repleta de talentos que no acaba de cuajar. Ante Irlanda, al menos, enderezó el rumbo gracias a una goleada gestada en una segunda parte excelente (3-0). Con dos goles de Romelu Lukaku, el delantero de 23 años del Everton, y un cabezazo perfecto de Witsel, el mediocentro del Zenit, el combinado de Marc Wilmots aplacó las críticas.

Bélgica se situó segunda del grupo E. Italia ya es matemáticamente primera y jugará con todos los suplentes en la última jornada ante Irlanda. Bélgica necesita como mínimo un empate contra la Suecia de Ibrahimovic, a la que solo le vale el triunfo, para pasar a los octavos. Si los belgas acaban segundos y España finaliza primera, ambas estarían en la misma parte del cuadro, pero no se podrían medir hasta semifinales.

CONTRAGOLPES PRECIOSOS Dominó siempre Bélgica, pero no encontró el camino del gol en la primera mitad, en la que Hazard dio el primer aviso con una volea fuera (m. 22) y Carrasco marcó en fuera de juego (m. 25). El jugador del Atlético fue una de las novedades de Wilmots, que acertó al prescindir del inoperante Fellaini. Un cabezazo de Alderweireld fue sacado por un defensa irlandés (m. 41) antes del descanso. Parecía simplemente una cuestión de paciencia que llegara el gol.

No hubo que esperar demasiado en la segunda mitad. Una galopada de De Bruyne originada en un posible penalti de Bélgica no señalado fue culminada con maestría por Lukaku (m. 47). Su zurdazo resultó imposible para Randolph. No sería el último. La ultradefensiva Irlanda se empezó a abrir y acabó vapuleada por el talento belga. Esa polémica jugada fastidió su plan.

Witsel, con un testarazo preciso (m. 60), y Lukaku, tras otro contragolpe de manual dirigido en esta ocasión por Hazard, certificaron el triunfo de una selección que no es la número 2 de la FIFA por casualidad. Le faltan la experiencia y el rigor de clásicos como Italia o Alemania, pero le sobra clase.

LA REACCIÓN El seleccionador belga aprovechó la ocasión para sacar pecho tras una victoria tan contundente. "Se dijeron muchas tonterías en la prensa. En los momentos difíciles los jugadores han mostrado su personalidad. Algunos tienen 25 años y es la primera vez que se ven así. Estaban hundidos, tuvimos que reanimarles", aseguró Wilmots con un toque de reivindicación después del triunfo.