Josep Maria Bartomeu ha comenzado su intervención en la Asamblea de Compromisarios del Barça para delimitar "el posicionamiento" del club en el momento político actual que vive Cataluña tras el referéndum del 1 de octubre en el que más de dos millones de personas votaron a favor de la independencia.

Aquella tarde el Barça jugó a puerta cerrada con el Las Palmas y en ese momento ha situado Bartomeu el relato de los hechos, aunque ha recordado que el 20 de septiembre el club azulgrana manifestó su "condena" por "una actuación contra la democracia, la libertad de expresión y el derecho a decidir" a raíz de la intervención de la Guardia Civil en la Conselleria d'Economia.

MEDIDA EXCEPCIONAL

Bartomeu ha confesado que la decisión de jugar el Barça-Las Palmas a puerta cerrada fue, al final, una decisión personal, "una de las más difíciles" que ha tomado como presidente, y que fue "una medida excepcional ante hechos excepcionales" y se ha vanagloriado de que tuviera "un eco excepcional" pese a que reportó las dimisiones del vicepresidente Carles Vilarrubí y el directivo Jordi Monés.

"Nadie puede dudar del compromiso del Barça con la sociedad catalana en el momento en el que vive", ha insistido Bartomeu, "pero no se puede confundir la responsabilidad que se tiene como presidente con la tibieza que algunos nos atribuyen".

ENCARCELAMIENTOS ANTIDEMOCRÁTICOS

El presidente barcelonista considera "antidemocráctico" que "haya dos personas encerradas por sus ideas políticas", en alusión a Jordi Cuxart y Jordi Sánchez y, en ese sentido, por la plena libertad de las ideas, ha exigido "respeto" para el Barça. "No seremos un objeto manipulable por intereses políticos, nadie puede apropiarse de nuestro escudo y nuestra bandera, nadie".

También ha sido contundente Bartomeu en tranquilizar a los poquísimos compromisarios con que el Barça seguirá jugando la Liga española. "Nunca pondremos en riesgo nuestra participación en las competiciones" ha dicho, antes de subrayar que "el vínculo" con el campeonato español está asegurado.

La asamblea ha empezado a las 11 de la mañana, en segunda convocatoria, y ha quedado legalmente constituida pese al escasísimo quorum. Solo se habían acreditado 347 personas de las 4.336 convocadas entre los compromisarios, los socios más antiguos, los presidentes territoriales de peñas, expresidentes del club y los miembros de varias comisiones de la entidad, además de los directivos. Ni siquiera la audiencia ha alcanzado el 1% de los convocados a primera hora.