Solo falta que el balón se lance al aire pero la temporada 2019-20 ya está en marcha. El WiZink Center, mismo escenario que hoy vivirá la Supercopa (Barça-Valencia a las 18.30 y Real Madrid-Fuenlabrada a las 21.00), acogió ayer la presentación oficial de la Liga Endesa en el tradicional acto que inaugura cada curso desde que la compañía eléctrica le da nombre. David Broncano repitió como maestro de ceremonias, en este caso acompañado de Bea Jarrín, y los dieciocho clubs de la competición estuvieron representados por un jugador. Javier Justiz fue el encargado de llevar el rojo del Casademont.

El oro mundial, y el resto de éxitos del baloncesto español, estuvieron muy presentes desde el principio. Tanto el presidente de la ACB, Antonio Martín, como el director de comunicación de Endesa, Alberto Fernández Torres, destacaron esos éxitos y ese trabajo del baloncesto español. No faltó precisamente Jorge Garbajosa, presidente de la Federación Española, ni el de la asociación de jugadores, Alfonso Reyes. La ACB puede presumir de ocho campeones del mundo, siete subcampeones y dos medallas de bronce.

El acto se llevó a cabo en la pista del WiZink Center, con los carros de los balones para el concurso de triples ya preparados, y con un buen número de invitados en la pista y en la grada. El nuevo logo de la ACB también fue protagonista porque, según Martín, va a suponer también un cambio en la cultura de la asociación de clubs. Después, el presentador de La Resistencia fue dialogando con los jugadores presentes en unos sillones en el centro de la pista mientras Jarrín dialogaba con los que estaban sentados en las mesas.

Los representantes de los equipos de la Supercopa, Laprovittola, Oriola, San Emeterio y Bellas, fueron los encargados de abrir el fuego, con alguna anécdota del campeón del mundo incluida. En el segundo turno salió a escena Javier Justiz, de quien Broncano desveló que le había tocado pagar unas cuantas multas por llegar tarde a los entrenamientos. El cubano justificó con buen humor que el cambio horario con su país le había pasado factura en sus primeros meses en Zaragoza. Después, Sadiel Rojas llevó paparajotes y Tornike Shengelia demostró sus dotes de percusionista con un cajón flamenco, entre otras anécdotas. Y la temporada ya puede dar comienzo.