Granville Waiters, exjugador del Barça de los 80 y también del Caja Bilbao, entre otros, ha fallecido este martes a la edad de 60 años. Su particular aspecto físico, calvo y con barba, y sus 2,11 de estatura, hacían de este pívot estadounidense, formado en la universidad de Ohio, y que luego estuvo cinco temporadas en la NBA, un jugador claramente reconocible en el Barça de la temporada 88-89, la que llegó a conocerse como la Liga de Petrovic, y que se llevó el equipo azulgrana, entonces dirigido en el banquillo por Aíto García Reneses.

El Barça confirmó en las redes sociales el fallecimiento de Waiters, que llegó al Palau como un especialista defensivo para descargar de trabajo a Audie Norris y que acabó por tener una actuación más que notable (8,4 puntos y 6,8 rebotes) en aquel equipo que contaba entre sus filas con Nacho Solozábal, Epi, Jiménez o Crespo.

Discreta carrera NBA

Elegido en el puesto 39 del 'draft' de 1983 por los Blazers, tuvo un papel secundario en la liga estadounidense, aunque llegó a disputar la final del 86 con los Rockets y también formó parte de la plantilla de los Bulls junto a Michael Jordan. Con 249 partidos a cuestas (2,4 puntos, 2,2 rebotes y 10,2 minutos de media) decidió probar suerte en Europa. El Barça necesitaba un relevo para Eugene McDowell y aterrizó en el Palau, de donde se despidió con un gran sabor de boca: 17 puntos en el quinto partido de la final frente al Madrid.

A la siguiente temporada decidió fichar por el Cajabilbao, donde le exigieron más protagonismo ofensivo. La falta de resultados, llevó al equipo vasco a sustituirlo por Tom Gneiting, aunque eso no evitó el descenso del club. Una fractura por estrés poco después puso fin a su carrera, lo que le hizo volver a Estados Unidos donde regentó durante años una cadena de guarderías llamada Granny Learning Centers.