Este domingo, otro equipo aragonés firmará su ascenso a la Segunda Real Federación Española de fútbol. Allí se unirá a los que han logrado la permanencia: el Tarazona, el Ebro y el Ejea; y también a los dos que ya han conseguido promocionar en la fase del ascenso directo, el Teruel y el Brea. De esta manera, el Huesca B o el Cuarte serán el sexto conjunto de la comunidad en militar en esta categoría que se juega a nivel nacional. 

Y todo estará decidido al punto de la mañana, pues el encuentro comenzará a las 9.00 horas en el campo de San Jorge. Una serie de circunstancias han deparado este horario tan atípico para una final de playoff, y es que a esta hora ha tenido que fijar el encuentro el conjunto azulgrana, anfitrión del evento. «La instalación está reservada ya hace días por el juvenil y por el Peñas Oscenses», explica el entrenador local, Dani Aso, que hace referencia a que ya hay otros dos encuentros que se juegan ese mismo día, a las 12.00 y a las 17.00, como también comunicó el club en una nota que publicó en su web. «No hay otro horario y no nos queda más remedio que ponerlo a las nueve de la mañana, para que haya tiempo suficiente en caso de que haya prórroga», asegura el míster. Aunque sí que hay otro campo. El Alcoraz. Allí es donde tenían pensado jugar, aunque al no ser el feudo que tienen fijado como oficial para el equipo, el Cuarte tenía la última palabra. 

«Entendimos que deportivamente tenemos más posibilidades de ganar el partido jugando en San Jorge», asegura Ricardo Gil, técnico del Cuarte, que confiesa que así lo consideraron «los responsables deportivos del equipo» y que además la decisión está basada «únicamente en motivos deportivos». Aun así, es consciente de que tanto en un campo como en el otro pueden «ganar, perder o empatar». Simplemente, consideran más factibles salir victoriosos del San Jorge. 

Sobre esta decisión, Dani Aso asevera que le da «mucha tristeza». «A mí me da pena y tristeza que los jugadores del Cuarte y del Huesca no puedan jugar en un estadio de Primera División», insiste el técnico azulgrana, que, sin embargo, también afirma que no quiere «entrar mucho en este tema», sino que prefiere «estar centrado en el partido». Y como consecuencia, tocará madrugar. Sobre si el partido podría haberse fijado para el sábado, Aso asegura que «si el equipo rival quiere poner el horario y el campo esto se va de madre».

Con respecto a la hora, por su parte, Gil explica que ya no es cosa suya: «Ellos no han podido poner otro horario y allí ya no podemos entrar», entiende el técnico y añade que, de todas formas, «es jugar muy pronto, pero es así para los dos». «Es un horario al que no estamos acostumbrados ni nosotros ni ellos, a ver quién es capaz de aclimatarse mejor para intentar que le afecte lo menos posible», reta el preparador.

Ambos equipos pueden hacer historia en su club. Así lo ven y por ello lo afrontan «con optimismo y muchas ganas de conseguir el objetivo», cuenta Aso. En la misma línea, Gil asegura que viven esta final «con muchísima ilusión». «No sé poner calificativo, es algo que no ha pasado nunca y sería un gran premio para un club que no tiene tantos recursos como otros», confiesa el del Cuarte. Así, el domingo a mediodía ya se conocerá cuál de los dos ha cumplido su sueño.