La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha anunciado que recurrirá la resolución del Consejo Superior de Deportes (CSD) sobre el aplazamiento de los partidos de LaLiga Santander Sevilla-FC Barcelona y Villarreal-Alavés y ha acusado al organismo presidido por José Manuel Franco de "poner en riesgo la integridad" de la competición.

"El CSD, mediante la adopción de la medida cautelar dictada en el día de hoy, interfiere indebidamente de una manera clara, absoluta y determinante en la autonomía deportiva de las competiciones futbolísticas, cuestión de extrema gravedad", indica la RFEF en un comunicado.

En el mismo, la RFEF aseguró que tanto la UEFA como la FIFA le han expresado su "total apoyo" tras conocer este "peligroso precedente" para el deporte internacional porque, según ella, es "la primera vez que en un campeonato nacional de liga se pretenden suspender encuentros oficiales como consecuencia de la cesión de futbolistas a sus selecciones". "Al no ser firme la resolución dictada por el CSD, se entiende que se rectificará con celeridad", añadió.

La RFEF recibió el pasado viernes el escrito del CSD en el que se le daba traslado del recurso presentado por LaLiga contra la resolución de la Jueza de Competición que decidió no acordar la suspensión de estos dos partidos. El CSD concedió un plazo a la RFEF de 5 días para que presentara sus alegaciones.

"De manera sorprendente, sin agotarse el plazo indicado para la RFEF, dicho organismo ha dictado una medida cautelar 'inaudita', totalmente ilegal, contraria al Reglamento Federativo aprobado por el propio CSD, contraria a todos los principios del derecho público español y contraria a todos los antecedentes jurídicos que en resoluciones del mismo CSD se han dictado en absolutamente todos los casos precedentes en temas de igual naturaleza, atribuyéndose, en esta ocasión, una competencia que no tiene para resolver sobre suspensiones de partidos (el último ejemplo fue el caso Reus Deportiu)", indica la federación.

La RFEF anunció que no va a solicitar una medida cautelarísima en lo contencioso-administrativo sino que acudirá a dichos juzgados para litigar sobre el fondo "con el fin de obtener una decisión final que impida este tipo de resoluciones en el futuro".

Asimismo, adelantó que de manera urgente va a enviar este martes su escrito de alegaciones al CSD. "El CSD tiene tiempo suficiente para rectificar, resolviendo sobre el fondo del tema planteado antes del próximo jueves, evitando una mayor incertidumbre a los afectados y al conjunto de fútbol español, ante el peligroso precedente mundial que ha generado", agregó.

A juicio del organismo presidido por Luis Rubiales, esta resolución del CSD ha provocado que tanto la FIFA como la UEFA le hayan transmitido su "total apoyo ante esta increíble resolución contraria a las normas del fútbol y a la Ley".

"El CSD debería resolver sobre el fondo del asunto antes del jueves si no quiere adulterar de una manera irreversible la competición de Primera División en esta jornada y en las siguientes. Parece no haberse dado cuenta el CSD que ha puesto en riesgo la equidad entre los equipos participantes y la integridad misma de la competición, con base en el Reglamento federativo que el mismo CSD aprobó, actuando así en contra de sus propios actos", argumentó.

Para la RFEF, tanto LaLiga como el CSD están "poniendo en riesgo completo la integridad de la competición favoreciendo en el caso de la LNFP y permitiendo en el caso del CSD una desigualdad completa entre los equipos de la misma competición y la misma categoría y fijando unas reglas distintas para la Segunda División, siendo igualmente una categoría profesional".

"Entendemos que el CSD con su medida adultera la competición de una manera determinante cuando ni la LNFP, ni el propio CSD han dicho nada sobre la totalidad de los equipos de Segunda División profesional que han tenido que disputar esta semana y la próxima semana sus partidos con un número considerable de jugadores cedidos a diferentes selecciones. O lo que aún parece más sorprendente y fuera de lugar, crea un precedente que puede alterar el futuro", señaló.

En este sentido, la RFEF se planteó qué decidirá LaLiga y el CSD cuando deban partir jugadores a la Copa de África u otras competiciones de otros continentes.

"¿Se suspenderán también discrecionalmente algunos partidos de aquellos equipos que consideren más relevantes? ¿Decidirá a partir de ahora el CSD la suspensión de los partidos de cualquier otro deporte por inclemencias del tiempo o por calendarios internacionales de cualquier deporte? ¿Va a revisar a partir de ahora el CSD todas las suspensiones de competiciones y partidos de todas las Federaciones o sólo en lo que atañe al fútbol?", dijo.

Con esta medida cautelar, el CSD, según la RFEF, "ha sobrepasado una línea jurídica que nunca hasta ahora había cruzado y que puede tener consecuencias nefastas para el deporte español y para el propio" Consejo.

La respuesta de LaLiga

LaLiga ha defendido que la resolución del Consejo Superior de Deportes (CSD) sobre el aplazamiento de los partidos de LaLiga Santander Sevilla-FC Barcelona y Villarreal-Alavés es "ajustada a derecho" y ha lamentado que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) la recurra, afirmando que parece que "no le importe la salud de los jugadores".

"El CSD es competente para la adopción de la medida cautelar y la resolución es ajustada a derecho, contando con jurisprudencia que la respalda", señaló LaLiga en un comunicado. "Fue LaLiga, como organizador de la competición, quien solicitó el aplazamiento de los dos partidos nada más conocerse la denegación de la suspensión cautelar de la Circular nº 1766 de FIFA por el TAS, que posteriormente fue secundada por los clubes locales y objeto de conformidad por los dos clubes visitantes", añadió.

Este martes, el presidente del CSD, José Manuel Franco, concedió la cautelar solicitada por el presidente de LaLiga, Javier Tebas, y confirmó el aplazamiento de los dos partidos de la cuarta jornada de LaLiga Santander, afectados por la cesión de jugadores sudamericanos a la fase de clasificación de la CONMEBOL y el escaso tiempo que dichos jugadores iban a tener para afrontar los duelos. Posteriormente, la RFEF anunció que recurriría la resolución y acusaba al CSD de "poner en riesgo la integridad" de la competición.

Respecto a este aspecto, LaLiga recordó que el calendario liguero fue aprobado por resolución del CSD, y que han sido los amistosos internacionales los que han sido "modificados de manera sobrevenida" por la FIFA y han incidido "sobre la integridad de la competición". "No existe perjuicio alguno para la RFEF, dado que la reprogramación de los partidos puede realizarse en fechas que no coincidan con partidos de las competiciones no profesionales que esta organiza", apuntó.

Además, el organismo presidido por Javier Tebas cuestionó que a la RFEF le preocupe la salud de los futbolistas. "Sorprende la postura de la RFEF, cuando hace escasamente un año se oponía a jugar partidos con un descanso inferior a 3 días en la vuelta a la competición tras el parón por COVID. Ahora quieren hacer jugar a los jugadores con menos incluso de 48h frente al anterior partido y tras un vuelo transoceánico y 3 partidos disputados en menos de 10 días, llegando incluso a destino el mismo día del partido, lo que afecta de forma clara a la salud de los jugadores. Parece que en este caso a la RFEF no le importe la salud de los jugadores", expresó.

También aseguró que el calendario de LaLiga SmartBank se aprobó "por unanimidad por todos los clubes" y que siempre se configura "sin detener la competición en los períodos internacionales". "Los clubes conocen dicha circunstancia desde hace muchas temporadas y diseñan sus plantillas en función de ello, sin afectación alguna a la integridad de la competición", subrayó.

Por último, señaló que "no le consta" que la UEFA y la FIFA hayan dado su apoyo al respecto a la RFEF, tal y como afirmó el organismo federativo presidido por Luis Rubiales. "Es más, en el procedimiento que se tramita ante el TAS, FIFA ha manifestado hoy al TAS que la posibilidad de que se produjera finalmente el aplazamiento, ante la existencia de un recurso al CSD, justificaba no adoptar ninguna medida cautelar contra la Circular nº 1766", concluyó.