El Ebro podrá disfrutar esta martes ante el Celta de Vigo (21.00) del premio que se ganó con su trabajo y esfuerzo en la Copa Federación, la clasificación a la fase final de la Copa del Rey. Los arlequinados se enfrentan al equipo gallego ya sin nada que perder pero con el objetivo de plantar cara al conjunto dirigido por el Chacho Coudet.

Además los de la Almozara disputan el encuentro en el estadio municipal de La Romareda, gracias a la gentileza del Real Zaragoza, para que nadie que quiera asistir al histórico choque se quede sin opción de presenciar el encuentro. Con el recuerdo de hace tres años cuando el equipo puso contra las cuerdas al Valencia, también en La Romareda, el Ebro buscará dar la machada y eliminar a un conjunto de la máxima categoría del fútbol español por primera vez en su historia. Para ello, Raúl Jardiel tiene claro lo que necesita su equipo. «Saldremos al césped con descaro, pasión y atrevimiento», asegura el entrenador de los arlequinados. «Nos ha costado mucho llegar hasta aquí. Tenemos que exprimir y disfrutar el choque al máximo», añade. 

El técnico confiesa la dificultad que tiene preparar un encuentro de estas características: «Aunque son encuentros totalmente distintos los que jugamos nosotros con lo que puedan ser partidos de Primera División, sí que hemos visto vídeos del Celta para ver dónde pueden ser más vulnerables y dónde se les puede meter mano», dice.

Jardiel reconoce las ganas que tienen de jugar en La Romareda: «Muchos de nosotros somos zaragocistas, hemos vivido momentos históricos como espectadores y ahora poder pisarlo y ser protagonista es algo muy bonito».

«Creo que es un partido atractivo tanto para nuestros seguidores como para a cualquier aficionado al fútbol», apunta el técnico. Jardiel pondrá toda la carne en el asador y utilizará su clásico 5-3-2 con Eder Díez y Álex Altube como referencias ofensivas. Por su parte, el Celta no reserva a nadie a excepción de su capitán Iago Aspas por su reciente paternidad, pero sí que se esperan rotaciones en su once inicial.

Edu Loscos, portero y capitán de los arlequinados, también muestra la intención del equipo de darle un susto a los vigueses. «La Copa es la competición más especial para los clubs modestos. En condiciones normales son muy superiores a nosotros pero todos los años hay sorpresas y por qué no vamos a poder darla nosotros. Son 90 minutos y somos once contra once», apunta ambicioso el arquero, que también muestra su satisfacción por poder jugar en «el templo del fútbol» de Aragón.

El portero, que fue el héroe de la clasificación para la Copa parando dos penaltis en la tanda ante el Lleida, reconoce que se le ha pasado por la cabeza la posibilidad de que se repita la historia. «Esperemos tener la oportunidad de ganar antes, pero si llegamos a los penaltis significará que el equipo ha sabido competir, y si el entrenador considera que tengo que jugar, estaré preparado».

Todavía se pueden comprar entradas, con un precio de 10 euros para el público general y 5 para abonados del Real Zaragoza, para un choque histórico en el que el Ebro sueña con dar la campanada y estirar su sueño copero.