Más de 19 temporadas como ciclista profesional acumulan las piernas de Ángel Vicioso, que ahora siguen sumando kilómetros, aunque de otra manera. El aragonés se retiró en 2017 y desde que colgó la bici decidió calzarse las zapatillas de correr para vivir nuevas experiencias. Una de ellas la disfrutará este domingo, ya que el deportista será uno de los casi 4.000 inscritos para participar en el medio maratón de Zaragoza, que tendrá un recorrido de dos vueltas por el centro de la ciudad, con salida en paseo Echegaray y llegada en la plaza del Pilar.

«El atletismo me enganchó muy rápido, desde el primer día. Me sigue permitiendo estar activo y no te roba tanto tiempo como la bicicleta», afirma Vicioso. Aunque no todo fue fácil cuando comenzó a correr, ya que tuvo que adaptar su cuerpo al cambiar de deporte. «Los músculos y articulaciones que se trabajan en el atletismo y en el ciclismo son diferentes, y al principio me lesionaba mucho», explica. «Aunque realizando entrenamientos específicos con ejercicios de fuerza he mejorado mucho», añade el natural de Alhama de Aragón.

No será su primera media maratón, ya que corrió una en Barcelona en 2019, pero Vicioso reconoce que será especial por disputarla en casa y por el tiempo de espera por la suspensión de la prueba, que comenzará a las 9.00, por covid. «Empecé sin ninguna pretensión y como un aficionado más, pero luego me veo entrenando a conciencia, haciendo series, volviéndome a cuidar la alimentación al máximo y pienso....¿Pero qué haces?, exclama Vicioso entre risas. La respuesta se la da él mismo. «Los que hemos competido profesionalmente en cualquier deporte somos así. Es una forma de vida. Me encanta la competición y correr me permite seguir teniendo esa sensación», confiesa el exciclista.

Para la carrera de mañana, sin mirar su puesto en la clasificación, sí que Vicioso quiere superar sus registros. «Me gustaría bajar de la hora y veinte minutos en el medio maratón, aunque lo veo complicado», señala el aragonés, que también intenta inculcar la pasión por el deporte a sus hijos. «Quiero transmitirles la importancia de llevar una vida sana, y el mejor ejemplo es que me vean practicándolo a mí», reconoce.

A pesar de su nueva afición, Ángel Vicioso no se olvida de la bici. «Sigo montando. Por ejemplo, el próximo fin de semana estaré con Induráin en Calatayud para participar en la Aragón Bike Ride», apunta. Pero antes, el domingo tendrá que trasladar su famosa punta de velocidad de los pedales a sus zapatillas para volver a sentir ese cosquilleo que tanto le hace disfrutar.