Tras un primer aplazamiento, la comparecencia para decidir el ingreso en prisión de Santi Mina solicitada por la acusación particular se celebrará este viernes, 16 de septiembre, en la Sección Tercera de la Audiencia de Almería.

El futbolista se encuentra en Arabia Saudí, donde juega en el Al Shabab cedido por el Celta, por lo que el tribunal ha accedido a que comparezca mediante videoconferencia desde este país sin necesidad de desplazarse a Almería.

La sesión se celebrará a las diez de la mañana a puerta cerrada y a la misma asistirán el representante del ministerio fiscal y los letrados de la acusación y de la defensa.

El tribunal aún tiene pendiente resolver la aclaración de sentencia que solicitó el abogado defensor, señalan desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Una vez resuelta esta cuestión, "se le otorgará un plazo para que, si lo estima oportuno, presnte recurso de apelación".

El Celta, según afirmó su presidente, Carlos Mouriño, en la entrevista que concedió a Far de Vigo la semana pasada, no ha previsto aún qué podría suceder con su acuerdo de cesión a Al Shabab en caso de que el tribunal acuerde el ingreso inmediato en prisión (previsiblemente el Celta podría iniciar la disolución de su vínculo legal con Mina) o la retirada de su pasaporte, que le impediría seguir residiendo en Arabia Saudí.

Condenado por abuso sexual

El tribunal presidido por la magistrada Társila Martínez absolvió al jugador del delito de agresión sexual por el que el fiscal pedía ocho años de prisión y la acusación particular nueve años y medio de cárcel, y lo condenó por un delito de abuso sexual por el que también se le impuso una orden de alejamiento de 500 metros respecto de la víctima durante 12 años y el pago de una indemnización de 50.000 euros.

Los hechos ocurrieron en la madrugada del 18 de junio de 2017, cuando Santi Mina aprovechó que su amigo David Goldar se había ido con una mujer a la caravana que tenía estacionada en las proximidades de una discoteca de Mojácar (Almería) para entrar al vehículo y abusar sexualmente de ella.

David Goldar fue absuelto del delito de agresión sexual que le imputaba únicamente la acusación particular, ya que la Fiscalía no actuó contra él en la causa, por el que también se enfrentaba a nueve años y medio de prisión.