El Mallorca rasca un punto en El Sadar que le acerca a la permanencia

El Mallorca sumó un valioso punto ante Osasuna que le acerca a la permanencia gracias al gol de Sergi Darder en el minuto 65 que empató el de Jon Moncayola en el 14.

Con los deberes hechos desde hace varias jornadas, Osasuna vive un final de Liga algo descafeinado, circunstancia que quedó patente con la mala entrada en El Sadar.

La intensidad quedó patente desde el comienzo. Dos exrojillos, como Lato y Nacho Vidal, fabricaron la primera. El lateral izquierdo colgó un buen centro que cazó su homólogo sin dejarla caer, disparando hacia la meta rival y encontrándose con una buena mano de Aitor Fernández, quien volvía a la titularidad tres meses y medio después.

De una falta lejana llegó el primero del encuentro. José Arnaiz puso el balón al área, el balón fue rechazado por la zaga visitante y Jon Moncayola, muy preciso, metió el cuadragésimo gol de Osasuna esta campaña con un disparo desde la frontal pegado al palo.

El ritmo bajo claramente tras el gol, con un Mallorca metido atrás esperando una contra. Por su parte, a Osasuna le faltó claridad en área rival, con un Aimar Oroz como hombre elegido para las incursiones.

La entrada de Abdón Prats dio profundidad y mordiente a los de Aguirre. Iker Muñoz reventó el esférico, pero el tiro salió algo centrado y fue repelido sin problemas por Rajkovic. Los baleares inquietaron la meta de Aitor por mediación de Gio González, segundos antes de hacer el 1-1.

Jorge Herrando despejó el córner como pudo y Sergi Darder recogió el esférico para pegarle dirección puerta, con la fortuna de ver cómo su disparo tocó en Peña antes de introducirse en la red. Las fuerzas se igualaban con media hora por disputar.

El Sadar tembló en el minuto 71 con la doble ocasión visitante. Primero, Gio midió la llegada de Lato a la perfección al punto de penalti para poner un buen centro que su compañero estrelló en las manos de Aitor. Nacho Vidal, a bocajarro, perdonó el 1-2.

Los cambios de Moi Gómez y Mojica no tuvieron el efecto deseado y Osasuna se estancó sin poder crear peligro real. El Mallorca siguió buscando la victoria hasta que Hernández Hernández decretó el final.