Así llega el CB Gran Canaria a la Copa del Rey

Es injusto y da hasta cierta 'rabia' hablar de la maldición del anfitrión en la Copa del Rey. Pero año tras año, la pesadilla del equipo que alberga el torneo es más alargada, y solo hay que recordar el 'batacazo' de Unicaja en 2024 ante La Laguna Tenerife en los cuartos de final de un campeonato que se disputó en el Martín Carpena.

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Poco tienen que hacer ante esto Jaka Lakovic y sus jugadores. Centrarse en lo estrictamente deportivo, y pensar en como ingeniárselas para tratar de secar a Valencia Basket en la última serie de cuartos de final, ante un equipo que ha superado los 96 puntos de media anotados en partidos de Liga Endesa.

Eso sí, al Dreamland Gran Canaria no le va a faltar la ilusión por volver a ejercer de anfitrión siete años después de la última ocasión, en un 2018 en el que el Barça se llevó el título. Los claretianos tienen motivos de sobras para pensar en que esta puede ser su primera Copa, y que el título sirva para redondear el excelente trabajo que se viene haciendo en el club los últimos años.

Homesley, el fichaje referente

Muchos ojos apuntarán hacia Caleb Homesley, uno de los grandes nombres propios de la temporada en Liga Endesa. Llegado del Tofas el pasado verano, el escolta estadounidense está en 13,9 puntos de media por partido, y con un acierto exterior superior al 40%. Es una de las grandes esperanzas del 'Granca' y un posible candidato al 'MVP' si su equipo avanza en el torneo.

Un curso más, el argentino Nico Brussino sigue siendo una pieza indispensable para Lakovic. El alero argentino vive su quinta temporada en la isla, la cuarta consecutiva, y su aportación sigue siendo capital: 11,5 tantos y 4,2 rebotes por partido.

Ambos son, seguramente, las caras más visibles de una plantilla talentosa entre la que se encuentran nombres como el de John Shurna, Joe Thomasson, o el exazulgrana Mike Tobey, llegado también el pasado verano tras un último año en el Estrella Roja.

El gran escaparate de Lakovic

Y en un torneo del que está pendiente todo el continente europeo, Lakovic tiene ante sí una oportunidad para que los equipos de Euroliga vean que el esloveno ya está preparado para la máxima exigencia en Europa, y quien sabe si su futuro puede estar en algún banquillo de la máxima competición continental.

Eso sí, la propuesta deberá mejorar el día a día que tiene Lakovic en Gran Canaria, y lo cierto es que el proyecto debe superar por mucho una rutina exitosa, que funciona, y por qué no, puede hacer que la Copa no se mueva de la isla.