Rubén Floría: La despedida de una leyenda

El pasado domingo se hizo oficial la marcha de Rubén Floría del Racing Club Zaragoza tras cuatro años entrenando al primer equipo juvenil, y un ascenso en su haber a la División de Honor, debido a la situación del equipo, en descenso con 17 puntos y a cuatro de la salvación a falta de 10 jornadas por disputar. "El problema de este año ha sido que hemos tenido muchas lesiones, al principio de temporada Goriz Martín, que es uno de nuestros mejores jugadores, se rompió el cruzado y el menisco. Luego tuvimos una racha en noviembre también de muchas bajas y quieras que no un equipo se cae cuando cuantas con tan pocos jugadores", afirma Floría. 

Entiendo que la entidad ha buscado cambiar la dinámica y en el fútbol lo primero que se rompe es el entrenador. Sé que a ellos les ha costado mucho tomar esta decisión, pero han pensado que era el momento de cambiar para intentar salir del descenso

La dinámica del equipo no era positiva y mantuvieron una reunión el entrenador y la directiva del club y el técnico aragonés se sentía "con fuerzas y que los chicos estaban conmigo, creía y creo que están totalmente capacitados para salvarse". Pero la opinión del club ha sido totalmente distinta. "Entiendo que la entidad ha buscado cambiar la dinámica y en el fútbol lo primero que se rompe es el entrenador. Sé que a ellos les ha costado mucho tomar esta decisión, pero han pensado que era el momento de cambiar para intentar salir del descenso", indica. 

Sé que ahora se están moviendo para que las raíces del club continúen creciendo y el futuro va a depender de si la gestión sigue siendo buena y salvar la categoría en la División de Honor juvenil. Para mí ya es el segundo o el tercer mejor club de Aragón, por detrás del Zaragoza y compitiendo con el Huesca

Floría le desea lo mejor al club aragonés tanto para lo que queda de temporada como para el futuro. "Espero que sigan haciendo las cosas como hasta ahora, pero estar en un nivel tan alto es muy complicado. Sé que ahora se están moviendo para que las raíces del club continúen creciendo y el futuro va a depender de si la gestión sigue siendo buena y salvar la categoría en la División de Honor juvenil. Para mí ya es el segundo o el tercer mejor club de Aragón, por detrás del Zaragoza y compitiendo con el Huesca", dice. Y asegura que "David Roche lo va a hacer muy bien, ya que también lleva muchos años en el club entrenando a las categorías inferiores y en el fútbol hay que ser profesional y tirar para adelante". 

Su nueva realidad

Tras tantos años sin parar de entrenar, esta es su primera semana inmerso en una nueva realidad, aunque de momento no lo está notando. "Estos primeros días estoy en esa burbuja porque he recibido múltiples llamadas para felicitarme por todo el trabajo hecho y como que no he notado el hecho de no estar entrenando", aclara. Aunque añade que "en unos días bajaré a la tierra y se me hará mucho más raro". 

En este tiempo ya "he recibido un par de llamadas de clubs de Aragón y me han dicho que puede que haya algún equipo también interesado de fuera, pero prefiero descansar hasta el año que viene y quiero disfrutar de mi familia y de mis amigos. Al final el fútbol te absorbe mucho". Floría no piensa mucho en el presente sobre volver a entrenar, aunque para el año que viene espera "que me llegue algún proyecto interesante y veremos qué me depara el futuro".