Las organizaciones confederales deberán pronunciarse sobre las reformas en la regulación de las ETT. Las directivas de UGT y CCOO se limitan por ahora a decir que estudiarán todas estas ideas y las debatirán internamente. Pero el debate ya ha salido a la luz.

Después de que la dirigente de CCOO María Jesús Paredes lanzara sus propuestas en una rueda de prensa junto al responsable de Adecco, la ejecutiva de la UGT catalana le acusó de poner en peligro la Seguridad Social, por la reducción de ingresos, y de actuar por electoralismo. La federación de servicios de UGT respondió diciendo que las declaraciones del portavoz de la central en Cataluña "no tienen relevancia", y mostró su acuerdo con varias propuestas de CCOO. Pero, coincidió en subrayar que esta central actúa buscando votos en las elecciones.

Fuentes de CCOO admitieron la influencia del contexto electoral en las manifestaciones "a título particular" de Paredes, y advirtieron de que las ETT nunca podrán sustituir al servicio público de empleo. Ambas federaciones están de acuerdo en levantar la prohibición que pesa sobre las ETT para ceder trabajadores a empresas de sectores de riesgo. Máximo Fernández, de UGT, propone que primero se estudie si realmente los trabajadores cedidos no generarían mayor siniestralidad.