EL EJECUTIVO considera que la fuerte subida de los productos siderúrgicos de los últimos meses no tendrá una repercusión "determinante" en el sector de la construcción, puesto que su impacto es inferior al de otros costes, según varias respuestas parlamentarias. El Gobierno cree que, desde el punto de vista industrial, no es necesaria la adopción de medidas especiales. EP