Los sindicatos convocantes de la huelga, ayer, en la factoría de Balay en Montañana (CCOO, OSTA y TIB) se mostraron satisfechos con la respuesta mostrada por los más de 1.200 trabajadores, que secundaron de forma "mayoritaria" la protesta, según apuntaron.

A falta de conocer el seguimiento del turno de la noche, Francisco Javier Sanz, perteneciente al sindicato TIB, subrayó que durante las cuatro horas de paro, que se realizaron coincidiendo con el inicio de los turnos de manana y tarde (dos horas por turno), "apenas entraron a la planta entre 50 y 100 personas", por lo que la convocatoria "se puede considerar todo un éxito".

JORNADA TRANQUILA A las puertas de la factoría no hubo concentraciones, ni protestas, aunque los representantes sindicales informaron a los empleados. El motivo de los paros parciales, en este caso, era la prima de productividad, una cuestión sobre la que los sindicatos y la empresa llevan negociando más de dos años. Los trabajadores consideran excesiva la carga de trabajo actual debido al incremento de la producción, por lo que reclaman una compensación económica. Este asunto ya fue motivo de paros parciales en la factoría de Balay en La Cartuja, aunque finalmente se alcanzó un acuerdo.

Los paros de dos horas se repetirán a lo lago de los dos próximos jueves del mes de septiembre "si no hay un acuerdo", apunto el responsable sindical, que matizó que, de momento, no se ha producido ningún contacto con la empresa.

A LA ESPERA Aunque el sindicato UGT no se ha sumado a la convocatoria de huelga, está previsto que a lo largo de la próxima semana los cuatro sindicatos representados en el comité de empresa mantengan una reunión, a la espera de que la empresa les cite para negociar. "Todo va a depender de si la empresa quiere arrelar esto o prefiere esperar", subrayó el representante del TIB.