La plantilla de Compovent lleva varios meses trabajando con incertidumbre en su fábrica de Cadrete. El 2009 ya fue un año complicado para sus 49 empleados, que padecieron un expediente de regulación de empleo temporal. Además, tuvieron que realizar tres jornadas de huelga el pasado mes de diciembre debido "a la intransigencia negociadora de la empresa en el calendario y en el pacto de empresa". Al parecer, la caída de producción que sufrió Gamesa, el principal cliente de Windar, afectó de forma directa a Compovent. De hecho, a finales del 2008 en la planta de Cadrete trabajaban más de 70 personas y hasta verano del año pasado había tres turnos de producción.