Gerardo Díaz Ferrán, presidente de la CEOE, no dimite pero cede el paso en la patronal. Ayer convocó elecciones anticipadas para el 21 de diciembre y anunció que no se presentará y que se mantendrá en el cargo hasta que entre su sucesor. En la carrera electoral que ayer se puso oficialmente en marcha, el líder de la patronal catalana Fomento del Trabajo, Juan Rosell, sale con ventaja: tiene el apoyo mayoritario de su organización.

Aunque todavía no ha hecho oficial si se presentará o no, fuentes cercanas a la candidatura que ya prepara Rosell para presidir la CEOE señalan que la oportunidad es "ahora o nunca", sobre todo después de que en la última ocasión, cuando se preparaba el relevo de José María Cuevas, optó por no presentarse a última hora.

Desde el pasado lunes, Rosell no ha parado de recibir llamadas de empresarios y representantes del sector financiero animándole a afrontar las elecciones en la patronal española.

El presidente de la patronal catalana --una de las entidades fundadoras de La Caixa--, cuenta con el apoyo de esta caja, una pieza clave al ser accionista de referencia de Repsol, Gas Natural o Abertis, así como con el aval de Rodrigo Rato, presidente de Caja Madrid. Al margen de las empresas y parte del sector bancario, la ministra de Economía, Elena Salgado, también ve a Rosell como una buena opción para encabezar una candidatura que facilite el diálogo y la concertación.

UNA PATRONAL FUERTE Públicamente el Gobierno de Zapatero ha actuado con prudencia durante el último año en el que Díaz Ferrán ha compaginado la interlocución social con los problemas de su gestión en su entramado de empresas, pero oficiosamente no ha evitado poner en entredicho su representatividad. Ante la negociación de la reforma laboral o del sistema de pensiones, fuentes próximas a la ministra Salgado no han dudado en confirmar su interés por tener una "patronal fuerte".

Las fuentes consultadas consideran que para lograr una victoria en Madrid, Rosell deberá intensificar las reuniones y los contactos con las grandes empresas con sede en esa ciudad. Personas de su equipo ya hace días que están sondeando tanto a las organizaciones sectoriales como a las territoriales. El objetivo final es conseguir una lista única, consensuada, que evite un enfrentamiento en las urnas.

MÁS VOTOS QUE VOTANTES La asamblea electoral que el 21 de diciembre decidirá el presidente está formada por 780 miembros que contabilizan 830 votos. El desfase se debe a que algunos electores tienen el mandato para votar tanto en nombre de una organización sectorial como territorial. La que más electores posee es Cepyme (83). Fomento tiene 45, los mismos que CEIM (Madrid).