Casi el 75 por ciento de los jóvenes aragoneses de entre 16 y 19 años no encuentran empleo ni tienen perspectivas de empezar a trabajar en los próximos meses dada la actual situación de crisis y las previsiones de que continúe en 2011. Así se desprende de un informe sobre la situación del mercado laboral en la Comunidad aragonesa, que ha presentado hoy el secretario de Política Sindical y Empleo de UGT Aragón, Raúl Machín, y la técnico de los Servicios de Empleo del sindicato, Eva Urbón.

Entre los colectivos más afectados por el paro se encuentran los jóvenes, los inmigrantes y las mujeres, que incrementan su tasa de paro en 2.822 desempleadas más en julio de este año en comparación con el mismo mes del año anterior. Eva Urbón ha hecho hincapié en la situación laboral que viven los jóvenes ya que la tasa de paro es de un 74,09 por ciento para los que tiene edades comprendidas entre los dieciséis y los diecinueve años y de un 38,25 por ciento para lo que están entre los 20 y los 24 años.

El estudio también analiza la contratación en la Comunidad aragonesa con 232.530 contratos realizados, un 5,05 por ciento más que en el mismo periodo de 2010, aunque lo más significativo es que de la totalidad de los contratos tan solo un 8,2 por ciento son indefinidos. Según los datos de la Encuesta de Población Activa para el segundo trimestre de 2011 son ya 113.600 los parados en Aragón con una tasa de paro del 17,42 por ciento, por lo que "se sigue destruyendo empleo pero de una forma más moderada aunque triplica la tasa del 2007 que era del 5,30 por ciento" ha explicado la técnico de los Servicios de Empleo de UGT Aragón, Eva Urbón.

Las prestaciones se han reducido en junio de 2011 con 5.484 personas menos que en junio del año anterior, y la renta activa de inserción es la única de todas las prestaciones que aumenta ya que es una renta dirigida a la población más vulnerable con pocos ingresos. Por todo ello, desde UGT-Aragón se ha exigido al Gobierno autonómico que el empleo sea una prioridad, por lo que se exige desde el sindicato "una reforma real y efectiva de las políticas activas de empleo que mejore el funcionamiento del mercado laboral". Se pide también la modificación del sistema de formación de los jóvenes, como ya han hecho otros países europeos, el cual tiene que adecuarse a las nuevas demandas del mercado combinando la formación con las prácticas remuneradas en las empresas.