Que el confundador de Apple, Steve Jobs, renunciaría a sus funciones como consejero delegado de la firma de la manzana tarde o temprano, era un secreto a voces, como lo era que su sucesor sería su mano derecha, Tim Cook, el hasta ahora director general. Sin embargo, la gran duda era --y es-- qué pasará con la segunda compañía con mayor valor bursátil del mundo tras la marcha de su cerebro, la persona que toma las decisiones y que ha tenido ideas como reinventar los móviles basándose en las capacidades de internet o dar un nuevo impulso a las tabletas.

Cook coge las riendas de una empresa que tiene la estrategia marcada --y los productos ideados-- para los próximos dos años, pero la competencia está dispuesta a aprovechar esta oportunidad de oro para robar mercado a Apple.

El primer síntoma de nueva etapa se vio ayer en la bolsa. Los grandes rivales de Apple vieron como sus acciones se apreciaban (Samsung subió un 2,4%, mientras que HTC progresó el 1,4% y Sony, el 2,06%), al mismo tiempo que los títulos de la firma de la manzana cerraron en números rojos, aunque con una pérdida moderada.

LANZAMIENTOS La segunda diferencia se verá en la propia compañía, en su estrategia, pues los perfiles personales de Cook y Jobs son bien distintos. El relevo, en cualquier caso, no fue improvisado. Jobs deja el día a día de la empresa (aunque continuará como presidente, un cargo más representativo que ejecutivo) con proyectos para los próximos dos años, según los analistas. El nuevo iPhone 5, que probablemente llegará en otoño, así como la tercera generación de la tableta iPad, ya para el próximo año.

Ahora, Cook tendrá que hacer frente a una competencia que ha visto como Apple se ha convertido en un gigante y que esperaba la retirada de Jobs para tomar partido. Samsung es quien ha hecho un mayor esfuerzo por competir con Apple hasta la fecha. Tras el iPhone, buscó la manera de competir con el mejor móvil posible; después del iPad, fue de las primeras en lanzarse a la batalla por las tabletas.

Sin embargo, puede encontrar su mayor rival en su propio país: Google ha comprado recientemente Motorola para competir con fuerza con sus propios teléfonos Android, y la compañía también tiene su propia tableta, la Xoom, ya en el mercado.