Las consecuencias de la crisis

Intervenidos de facto

El Gobierno se la juega el próximo mes y medio por la presión de los mercados. Las dudas sobre la banca, las autonomías y Grecia deben quedar despejadas

Intervenidos de facto

Intervenidos de facto

ROSA MARÍA SÁNCHEZ

El Gobierno sabe que se la juega en el próximo mes y medio. Hasta final de junio pasarán muchas cosas que pueden determinar que el país precise o no ayuda de Europa para salir adelante, admiten fuentes oficiales. En otras palabras, que España tenga que ser o no intervenida o que, en un término medio, sea precisa una intervención blanda para la banca.

Para este último escenario el Gobierno ya tiene un Plan B que incluye pedir entre 30.000 y 40.000 millones a Europa para recapitalizar la banca, como adelantó EL PERIÓDICO. Sería un paso más en la intervención de facto que, de algún modo, ya padece la economía española. El Banco Central Europeo (BCE) ha arrebatado al Banco de España la tutela de la reestructuración financiera y el Gobierno, tal como ha reconocido el ministro de Hacienda, consulta absolutamente todo lo que hace con las autoridades europeas.

Casi nadie, ni el agorero economista Nouriel Roubini, piensa que España sufrirá una intervención "clásica" como Grecia, Irlanda y Portugal, donde los representantes del BCE, la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) --la troika-- prácticamente se sientan en el Consejo de Ministros. "España es demasiado grande para ser intervenida", opina Roubini, quien cree que, "en lugar de una intervención dramática", en España se verán "mayores controles sobre la libertad de acción del Gobierno".

Pero el tiempo aprieta. Por eso, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el ministro de Economía, Luis de Guindos, piden al BCE que mueva ficha. Saben que es el único, que con un mensaje de que tomará las medidas necesarias, es capaz de proporcionar el mes o mes y medio que el Gobierno necesita para que se clarifique el panorama sin la presión de una prima de riesgo en 500 puntos o más. Pero debe ser ya. "No podemos soportar otra semana como la pasada", valora un experto que tiene línea directa con Gobierno y oposición.

Lo que reclama el Gobierno vendría a ser una intervención al revés. Primero se han puesto en marcha las reformas; ahora se exige ayuda para poder culminarlas. En este mes y medio se debe clarificar si Grecia sale o no del euro (el 17 de junio hay elecciones). Antes, este miércoles, habrá una cumbre europea en Bruselas de la que podría salir un mensaje sobre relajación de los plazos para reducir el déficit que al Gobierno le vendría muy bien, como admite en privado.

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