Los consejos de administración de Liberbank, Ibercaja y Caja 3 aprobarán previsiblemente esta tarde instrumentar el protocolo de integración del negocio bancario de las tres entidades, que dará origen al séptimo grupo financiero español por activos (114.000 millones de euros) y por volumen de negocio (181.000 millones de euros).

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Además, según informaron fuentes conocedoras de la operación, el grupo se convertirá en el quinto del país por negocio fuera de balance (fondos de inversión, seguros y fondos de pensiones, fundamentalmente).

Ibercaja, la de mayor tamaño, tendrá un peso del 46,5% en el grupo resultante de la integración, Liberbank del 45,5% y Caja 3 del 8%. En cuanto a la cúpula de la entidad, Amado Franco, presidente de Ibercaja, presidirá también el futuro grupo, y Manuel Menéndez, primer ejecutivo de Liberbank, será el consejero delegado.

Las partes han acordado atenerse a los preceptos que establece el Código de Buen Gobierno y constituirán un consejo de administración en el que un tercio de los miembros serán independientes.

El grupo, que nacerá con una necesidad de financiación mayorista por debajo del 20%, tendrá la sede social en Madrid, así como varias sedes operativas, y estará dotado de una estructura eficiente y flexible. Su red estará integrada por más de 2.600 oficinas en la Península Ibérica y tendrá una plantilla superior a los 11.000 empleados.

Las mismas fuentes explicaron que la operación, acometida desde la lógica empresarial y en ningún caso por exigencias del Gobierno, parte de elementos como una cultura compartida basada en la cercanía y la confianza al cliente, la complementariedad de los negocios y la aportación por parte de cada entidad de una fortaleza distinta.

Economía, al tanto de la operación

Uno de los negocios que se pretende potenciar es el de financiación a las pymes. El mayor tamaño proporcionará al grupo resultante la posibilidad de acceder a los mercados de financiación en condiciones más competitivas.

Fuentes oficiales indicaron que el Ministerio de Economía ya está al tanto de la operación de integración de las tres cajas y la ve con buenos ojos.

Los consejos de administración de lbercaja Banco y de Banco Grupo Caja 3, y los de las cuatro cajas accionistas de los mismos -Ibercaja, Caja Inmaculada, Caja Círculo y Caja Badajoz- ya acordaron el pasado mes de febrero el inicio de su proceso de fusión.

Por su parte, Liberbank es el banco constituido por el Grupo Cajastur, Caja de Extremadura y Caja Cantabria, al que aportan los activos y pasivos del negocio bancario (excluidos los afectos a la obra social de cada caja) y a través del que realizan el negocio financiero por vía indirecta.

De culminarse la integración, se trataría de la primera que se acomete entre las entidades de tamaño mediano tras la segunda reforma financiera aprobada por el Ejecutivo el pasado 11 de mayo.

Dicha reforma, que establece la necesidad de provisionar el crédito sano al negocio promotor, tiene como objetivo secundario impulsar la consolidación del sector y acelerar las fusiones con vistas a que se constituyan grupos financieros con masa crítica para acceder sin problemas a la financiación exterior. El Ministerio de Economía es partidario de grupos con un volumen de activos superior a los 100.000 millones de euros.