Una industria con historia y altamente competitiva

El gigante estadounidense Kimberly-Clark desembarcó en Calatayud en 1997. Compró la fábrica de pañales a Lhysa-Autex, dando estabilidad al centro tras años de sucesivos cambios de propiedad. Entonces tenía 154 empleos fijos, ahora pasa de 220 (más unos 30 eventuales). Es una fábrica altamente competitiva por sus costes de producción y situación geográfica. Surte al mercado español y exporta sobre todo a Italia, Portugal y Francia. Kimberly-Clark invirtió este año tres millones de euros para una nueva línea de pañales Huggies y en el 2011 elevó su producción el 15%.

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