El número de trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (ERE) autorizados por las autoridades laborales o comunicados a las mismas --con la reforma laboral del Gobierno, en vigor desde el pasado 12 de febrero, ya no hace falta autorización oficial-- aumentó un 53,3% en los ocho primeros meses del año en comparación con el mismo periodo del 2011.
En concreto, un total de 299.021 trabajadores se vieron afectados por un ERE hasta agosto, en contraste con los 195.032 trabajadores que estuvieron implicados en una regulación de empleo durante los ocho primeros meses del 2011, según los datos del Boletín de Estadísticas Laborales del Ministerio de Empleo.
Los ERE en los que se alegaron causas económicas (problemas de tesorería o financiación, quiebra, deudas o suspensión de pagos, baja productividad o aplicación de medidas económicas) se dispararon un 105%, hasta 15.790 expedientes, el 71,7% del total. Por causas técnicas se autorizaron 196 expedientes hasta agosto, un 30% menos que en el mismo periodo del 2011, mientras que por causas organizativas o de producción se registraron 5.731 expedientes, con un crecimiento interanual del 22,9%. Por fuerza mayor hubo 241 ERE, un 26,3% menos.