La fuga de una compañía clave de Aragón
Aliaga dice que Kimberly-Clark no dio opción a negociar el cierre de la planta de Calatayud
EFE
El consejero de Industria del Gobierno aragonés, Arturo Aliaga, ha revelado hoy que la dirección de la multinacional norteamericana Kimberly-Clark no dio opción a su departamento a negociar alternativas al cierre de su planta de producción de pañales en Calatayud (Zaragoza).
Aliaga, que ha hecho estas manifestaciones durante una visita al Parque Tecnológico Walqa de Huesca junto la presidenta de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, ha lamentado que los responsables de la dirección de la compañía en Europa optaran por informar ayer a los trabajadores del cierre de la planta, sin avisarle previamente.
El consejero ha asegurado que hace unos días firmó una carta junto al titular de Economía en el Gobierno aragonés, Francisco Bono, para solicitar una entrevista "cara a cara" con la dirección de la multinacional en Londres.
Ha añadido que ayer, mientras esperaba una respuesta, fue informado por la propia dirección de que uno de sus ejecutivos estaba en la planta de Calatayud para informar de los planes de cierre y que apenas disponía de quince minutos para mantener una breve conversación antes de emprender el viaje de regreso a Londres.
El consejero de Industria ha admitido que las primeras informaciones sobre el interés de la compañía en cerrar o vender la planta las tuvo el pasado mes de octubre, lo que le llevó a establecer contactos con otras empresas para valorar la posibilidad de venta de las instalaciones y garantizar el mantenimiento del máximo número de puestos de trabajo.
A este respecto, ha señalado que "ha sido imposible convencerles no ya de que siguieran con su actividad en España sino de que nos dieran más tiempo para intentar buscar a otra compañía para cerrar un acuerdo".
Según ha explicado, el argumento utilizado por la multinacional para rechazar la posibilidad de venta de sus instalaciones es evitar que la operación tuviera "efectos perniciosos" sobre la plantilla que pudieran repercutirles en el futuro.
A juicio del consejero, "no sólo estoy convencido de que esta era una decisión tomada sino que estoy seguro de que tenían provisionados fondos para las indemnizaciones".
En relación a este punto, ha añadido que las noticias que tenía eran que la empresa tenía previsto partir en las negociaciones de una indemnización superior a los 20 días por año trabajado a fin de facilitar un posible acuerdo.
La dirección de la multinacional Kimberly-Clark anunció ayer a los 208 empleados de su planta de Calatayud su decisión de cerrar las instalaciones a mediados de mayo ante la imposibilidad de encontrar un comprador.
La empresa emitió ayer un comunicado en el que recordaba que el pasado mes de octubre de 2012, la compañía anunció su decisión estratégica de salir de la categoría de pañales en Europa y puso en venta la planta de Calatayud a la espera de encontrar un posible comprador.
En la planta de Calatayud trabajan 208 empleados -más 17 externos en logística y seis en seguridad y restauración- y la compañía espera que finalice su producción alrededor de mediados de mayo.
- Hacienda puede multarte ya con más de 100.000 euros por ingresar o sacar dinero en efectivo
- Una mujer acude a las Urgencias del Clínico con un hacha para matar a su marido
- Ha sido muy duro, pero nunca se vino abajo'. Los padres de Vallejo celebran su debut con el primer equipo tras su grave lesión
- ¿Qué es la estenosis uretral que tanto afecta a los hombres mayores de 65, y qué riesgos tiene?
- Aparece muerto un vecino de Cuarte de Huerva desaparecido desde hace más de un año
- Roban mil euros en una charcutería de La Almozara, pero no se llevan nada de jamón
- Hugo Carrillo es un cañón, un futbolista de Primera División'. El coordinador de la cantera del Xerez elogia la apuesta del Zaragoza
- Cancela su participación en Pasapalabra tras quedarse embarazada