La dirección de Ibercaja agradeció ayer a todos los implicados en la negociación, y especialmente a los representantes de los empleados que han suscrito el acuerdo, el "esfuerzo realizado". En este sentido, expresó su satisfacción por la rapidez con que se ha alcanzado el pacto laboral. "Esta demostrada capacidad de negociación redunda en beneficio de la imagen de la entidad, sin lesionar los intereses de los trabajadores", destacaron desde la entidad que preside Amado Franco.

La dirección del banco aragonés ensalzó la "cultura de diálogo" que respira la institución, "un activo muy relevante para preservar las fortalezas de Ibercaja, en el difícil contexto de la reestructuración del sistema financiero español". La entidad hizo hincapié en el voluntariedad de los despidos y subrayó que las medidas acordadas mejorarán su competitividad y eficiencia.