Los mineros de la empresa Carbonífera del Ebro de Mequinenza (Zaragoza) se encuentran "desesperados" después de que el Ministerio de Industria no les haya vuelto a incluir en la corrección de errores del decreto del carbón publicada el pasado miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

El presidente del comité de empresa de Carbonífera, Francisco Montull, ha subrayado hoy a Efe que esta última resolución, que otorga a Teruel una producción anual de 6.254 gigavatios, ha sido la "puntilla definitiva" y deja "muy tocada" a la mina de Mequinenza.

"Esto ha acabado de hundirla", ha lamentado Montull, quien ha recordado que la empresa lleva un año con un Expediente de Regulación de Empleo debido a la negativa de Endesa a quemar el carbón.

Según el presidente del comité de empresa, los mineros siguen "luchando", pero sabiendo que "las posibilidades son mínimas y las fuerzas menos".

Montull ha reconocido que tenían alguna esperanza después de la última reunión que mantuvieron en Madrid el pasado 19 de diciembre, a la que él asistió, con el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, quien, ha asegurado, se comprometió a mantener otra reunión para tratar de encontrar una solución a la situación de Mequinenza.

Los mineros denuncian que se encuentran en un "limbo" ya que están fuera del plan del carbón pero tampoco ha salido ningún plan de cierre con lo que ven un futuro "más negro que el carbón!.

Aunque ha subrayado que "la esperanza nunca se pierde" ha insistido en que los mineros están en "un limbo de desesperación".

Además, el 30 por ciento de los trabajadores del ERE ya no cobran ningún tipo de prestación y al formar parte de este expediente tampoco pueden acogerse a otras ayudas del estado.

El consejero de Industria, Arturo Aliaga, reconoció ayer a los medios que la orden publicaba lo que ya se sabía respecto a la central térmica de Andorra, que se ha valorado como la "más eficiente del sistema energético con carbón de generación" y mostró su satisfacción porque el Plan Miner se va a cumplir "en lo pactado".

Respecto a Mequinenza, Aliaga ha asegurado que "se ha hecho todo lo posible" pero ha aludido a "razones técnicas de peso, sólidas y serias, de que había ciertos riesgos" por lo que ahora es la empresa la que "tiene que tomar la decisión".

El consejero de Industria ha precisado que hay ayudas al cierre y otros mecanismos para paliar el impacto y "en esa línea es en la que tenemos que trabajar".