Durante muchos años, la competencia en el mundo de las telecomunicaciones provocó una caída casi ininterrumpida de los precios de servicios como internet en casa, las llamadas de móvil o el consumo de datos. Pero ese descenso de los precios conllevó un deterioro de las cuentas de las empresas del sector, que llevan dos años avisando de que el mercado, con esos precios, es insostenible. Para asegurar la inversión y la correcta prestación de servicios --según las operadoras de telecos--, ahora las firmas han llevado a cabo subidas de tarifas a cambio, eso sí, de mayores servicios.

La última en anunciar una "renovación de planes de precios" ha sido Vodafone, cuyos nuevos y viejos clientes tendrán que abonar entre dos y tres euros más a partir del 18 de abril, cuando entren en vigor los nuevos planes. La compañía, a cambio, ha dotado de mayores prestaciones a los planes ofrecidos, sumando servicios como el roaming incluido en todos los planes de contrato, un aumento de los datos de descarga de entre 500 MB y 1 GB y Vodafone TV on line (canales de televisión de TDT en el móvil). En la oferta convergente (internet en casa, móvil y teléfono), también se incluyen las llamadas gratis entre miembros de toda la familia. "El valor que se ofrece a los clientes con estos nuevos servicios es entre cuatro y cinco veces superior al ajuste medio de los planes de precios", justificó la compañía. Pero aunque se produzca una mejora de los servicios, hay también una subida de precios.

El aumento de precios del operador rojo se suma al que acometió Telefónica, que el 5 de febrero aplicó un aumento también de tres euros en las tarifas de sus planes convergentes (Fusión). A cambio, la empresa aumentó la velocidad de subida de los planes de fibra para hacerla simétrica (igual velocidad de subida y bajada), y aumentó asimismo en 1 GB los datos de descarga de las tarifas contratadas (los que tenían 1 GB, pasaron a 2 GB).

Orange no fue menos: en marzo entraron en vigor los nuevos precios de la tarifa Canguro, la que agrupa los servicios de internet en el hogar, móvil, datos y fijo. La subida fue de tres euros y, a cambio, también ofreció una mejora de las prestaciones de su oferta: las conexiones de fibra de 30 MB pasaron a 50 MB, con un aumento de los minutos de llamadas gratis en la tarifa Ahorro (de 150 a 200 minutos), también hubo un incremento de datos de descarga de entre 500 MB y 1 GB)

CAMBIO DE CONDICIONES De este modo, las tres grandes operadoras han acometido un aumento de las tarifas a sus usuarios a cambio de mejoras en los servicios "sin dar a los usuarios la posibilidad de mantener las condiciones contratadas", denunció la organización de consumidores Facua. Es ese uno de los motivos de queja de los usuarios: firmaron unos contratos por unas tarifas que, unilateralmente, los operadores han cambiado.

Facua ha denunciado estas subidas de precios a las autoridades de competencia, así como "la ilegalidad de que los usuarios con compromisos de permanencia vigentes sufran incrementos en los precios, ya que estos deben mantenerse hasta la finalización del periodo establecido en los contratos, que vinculan a las dos partes". La organización recuerda además que el cliente tiene derecho a darse de baja si no está de acuerdo con los nuevos precios aunque tenga un contrato de permanencia.

Fuentes del sector aseguran que los precios de las telecomunicaciones "tocaron fondo" en plena crisis, y que las compañías de telecos ajustaron mucho los precios pese a que otros servicios básicos subían. Además, han tenido que acometer inversiones. Por último, también deben digerir la compra de empresas: Orange adquirió Jazztel, y Vodafone compró Ono.