Se habla mucho de Europa pero es el momento de pasar a la acción. El espíritu europeo está vivo». Estas palabras no las ha pronunciado un líder político europeísta, sino el presidente y consejero delegado de la multinacional alemana Siemens, Joe Kaeser, al anunciar la fusión con su competidora francesa Alstom. La unión de los dos fabricantes ferroviarios creará un gigante que ocupará el segundo puesto mundial en el sector y con el que la Unión Europea (UE) quiere plantar cara al nuevo conglomerado chino CRRC.

Alstom y Siemens han firmado un acuerdo de fusión para crear la nueva compañía Siemens Alstom, que sumará un volumen de negocio de 15.300 millones de euros y un total de 62.300 trabajadores. El número uno del sector desde que se produjo una fusión de empresas ferroviarias en China es CRRC, que factura más de 28.000 millones de euros anuales y cuenta con una plantilla que supera los 180.000 empleados.

Alstom y Siemens suman en España dos fábricas, varios de centros de investigación y alrededor de 5.500 empleados, aunque una parte de ellos no formarán parte del nuevo grupo ya que se dedican a otros negocios al margen del sector ferroviario.

Los sindicatos reaccionarion con cautela a la espera de conocer más detalles de los planes del nuevo grupo Siemens Alstom. El sindicato UGT envió ayer un mensaje de tranquildad a la plantilla de Santa Perpétua de la Mogoda (Barcelona) con una nota en la que reiteraba la necesidad de «un plan de empleo que garantice el futuro de la planta».

PROYECTOS EMBLEMÁTICOS / Entre los últimos y más emblemáticos proyectos de las dos compañías se encuentran la fabricación de una buena parte de los trenes de la línea del AVE entre Barcelona y Madrid a cargo de Siemens y el tranvía de Barcelona y los convoyes sin conductor de la línea 9 del metro barcelonés por parte de Alstom.

Los dos máximos directivos de Siemens y Alstom descartaron que la fusión tenga efectos negativos sobre la plantilla del nuevo grupo gracias a la «complementariedad” de sus mercados tanto geográfica como de productos. El acuerdo incluye garantías para la plantilla en Francia, formada por 9.000 empleados de Alstom, y el mantenimiento de las factorías durante un mínimo de cuatro años.

El sindicato alemán IG Metall ha transmitido un mensaje de tranquilidad para los 13.500 empleados de Siemens en Alemania que pasarán a formar parte del nuevo gigante ferroviario.

OPORTUNIDADES / «Esta fusión crea oportunidades para la plantilla», indicó el presidente y consejero delegado de Alstom, Henri Poupart-Lafarge, que enmarcó la fusión en «un mercado al alza con una creciente globalización» y en el que «hay que invertir para estar presentes en todos los sitios».

Aunque las dos empresas han presentado la operación como «una fusión entre iguales», Siemens controlará el 50% de las acciones de la nueva empresa fusionada, con la posibilidad de superar ese nivel en unos años, y tendrá el control del nuevo consejo de administración, aunque el actual máximo directivo de Alstom asumirá el puesto de consejero delegado.

Las dos compañías comunicaron también que el Estado francés no ejercerá la opción de compra de acciones en Alstom.

SUBIDAS EN BOLSA / Las acciones de Siemens, Alstom y de Bouygues experimentaron subidas en la bolsa después de la confirmación de la fusión para crear un «campeón europeo de la movilidad».

La transacción, no obstante, está pendiente de la aprobación de los reguladores y será consultada a los comités de empresa, por lo que se espera que esté concluida a finales de 2018. Si Alstom decide romper el acuerdo con Siemens, deberá indemnizar a la firma alemana con 140 millones de euros.

El grupo resultante, que estará bajo la dirección del actual responsable de Alstom, Henri Poupart-Lafarge, cotizará en la Bolsa de París y tendrá su sede en la región parisina, según informaron ambas firmas.