Alta tensión en Opel
Los sindicatos piden a los trabajadores que no realicen horas extraordinarias. El comité descarta negociar si la firma no acepta 5 puntos «irrenunciables»
El comité de Opel España trasladará hoy a la empresa su negativa a negociar el nuevo convenio colectivo si la dirección no se compromete a recoger en el nuevo pacto laboral cinco puntos que las organizaciones sindicales consideran «irrenunciables». El primero y más importante será la presentación de un plan industrial que garantice plena capacidad productiva en Figueruelas durante los próximos años. Además, exige el retorno del contrato de relevo (afecta a más de 400 empleados), la inclusión de los trabajadores de los niveles 6 y 7 en el nuevo convenio colectivo, la vuelta de los 170 empleados temporales despedidos antes de final de año y un plan de rejuvenecimiento para la plantilla. Estos cinco puntos, según manifestaron los portavoces sindicales, «no solo no restan competitividad a la planta, sino que beneficia tanto a la compañía como a la plantilla».
La decisión de dar por zanjado el diálogo se adoptó ayer de forma unánime por todos los sindicatos que integran el comité de empresa (UGT, CCOO, CGT, OSTA y Acumagme), con el objetivo de salvaguardar la «unidad sindical» en una negociación cargada de tensión. De hecho, los sindicalistas más veteranos no recuerdan una situación tan límite en los 35 años de Opel España.
El preludio de este cierre de filas de la parte social fue la asamblea de afiliados que UGT celebró el pasado sábado y que concluyó con la decisión de levantarse de la mesa si la empresa no recogía sus exigencias. Ayer, el resto de sindicatos se sumó. «Hemos adoptado una posición unitaria, que creemos que es la mejor posible: ir todos a una», subrayó ayer la presidenta del comité, Sara Martín, al término del cónclave sindical.
INTERLOCUCIÓN
Hoy está prevista una reunión en la que la parte social trasladará esta postura a la empresa, a la que los sindicatos acusan de falta de interlocución. «Tenemos la sensación de que no estamos siendo del todo escuchados», dijo ayer la presidenta del comité, que calificó de «atípica» la negociación iniciada con el grupo francés PSA en comparación con las celebradas años atrás con GM.
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