Sin rumbo claro, pero tendente al descenso. El Ibex y el resto de bolsas europeas han iniciado la semana con una subidas mínimas. Después de que el Gobierno aprobara la paralización de todas las actividades no esenciales desde este lunes hasta el el jueves 9 de abril, los mercados no parecen hallar un rumbo claro.

Asia ha caído esta madrugada, aunque los descensos se han recortado en los últimos compases de la sesión. Cabe recordar que Europa cerró la semana pasada en verde en medio de fuertes medidas por parte de los Gobiernos y organismos para frenar el impacto económico de la enfermedad, y también mientras en Italia parece que la situación va mejorando.

En todo caso, el temor sigue dominando y eso se refleja en una elevada volatilidad que tan pronto inclina el índice hacia el verde como hacia el rojo. El Ibex pasa de preparar el asalto a los 6.800 puntos a replegarse por debajo de los 6.700 con caídas cada vez más cercanas al 2%.

El sector bancario es uno de los que más de cerca vigilan los inversores después de que el Banco Central Europeo (BCE) les haya recomendado formalmente retrasar cualquier decisión sobre sus dividendos, al menos, hasta octubre. En este sentido, este lunes se ha conocido que grandes firmas europeas del sector como Unicredit, ABN Amro e ING han tomado nota y revisado sus propuestas de retribución al accionista.

Además, conviene recordar aquí que el viernes a última hora de la noche, la agencia Fitch procedió a poner en bloque en perspectiva negativa el rating de los bancos españoles. Varias entidades financieras rondan retrocesos del 3% este lunes. Son los casos de Banco Santander, BBVA y CaixaBank.