Aragón es territorio de energía. Molinos, placas solares o presas para generar energía hidraúlica forman parte del paisaje aragonés y de su economía. Cuando Labordeta cantaba a su tierra la definía con "polvo, niebla, viento y sol" y, quizás por casualidad, las dos últimas están más a la orden del día que nunca por ser la clave del desarrollo de las energías renovables.

Efectivamente, el futuro de la energía reside en las instalaciones eólicas y fotovoltaicas, con una generación constante y madura que no hace sino crecer en importancia día tras día. Y no solo eso: el hidrógeno y los gases renovables, necesarios para complementar a las fuentes principales, tienen un potencial extraordinario en el territorio.

EL PERIÓDICO DE ARAGÓN reúne en uno de sus Desayunos temáticos a cinco de las caras más visibles del panorama energético para debatir sobre el estado actual del sector en la comunidad aragonesa.Temas como el auge de las renovables, la descarbonización, el impacto del desarrollo energético en el medio rural o la electrificación fueron tratados por José Antonio Pérez Cebrián, asesor estratégico de Forestalia; Fernando Salvador, Director Regional de Aragón y Zona Norte de Redexis; José Ignacio Lallana, Delegado en Aragón, Cataluña y La Rioja de  Red Eléctrica; Diego Fabeiro, Director de Desarrollo de Activos e Infraestructuras de Capital Energy; y Sergio Breto, Director General Energía y Minas del Gobierno de Aragón.

Por parte de Forestalia, Pérez Cebrián explica que "son una empresa aragonesa que no se quiere dedicar solo a fomentar y a atraer inversiones en energía, sino que quiere ser actriz en el territorio con otras actuaciones". "Nuestra vocación desde que fuimos adjudicatarios en la subasta del 2016 y del 2017, aparte de abaratar la energía, fue que toda la riqueza y el desarrollo tuvieran lugar en Aragón", dice Pérez Cebrián.    Cuentan con 2.000 megavatios [en adelante MW] ya transferidos a las instalaciones y se encuentran en trámites administrativos para gestionar 6.000 más, lo que supondrá 5 mil millones de euros en inversión.

En cuanto a Redexis, Fernando Salvador afirma que son "la distribuidora predominante en Aragón, con presencia en alrededor de 215 municipios. Pone el énfasis en que estamos en un momento en que "hablamos mucho de energías renovables, pero no tanto de los gases renovables, como el hidrógeno, algo que el sector está impulsando y sobre lo que hay que poner orden y planificar en España".

En lo referente a Red Eléctrica, José Ignacio Lallana cuenta que son "un operador y transportista referente a nivel nacional", cuya responsabilidad es garantizar el suministro eléctrico en todo el territorio con los centros de control. Trabajan en la transición energética dando acceso a red, aplicando medidas e identificando agentes para operar en el mercado eléctrico; y son los encargados de diseñar, construir, mantener y operar la red de alta tensión.

Diego Fabeiro, director de Desarrollo de Activos e Infraestructuras de Capital Energy, posiciona a la empresa como "la plataforma independiente de desarrollo de renovables más importante de la península Ibérica". "Contamos con una cartera de más de 35.000 MW en proyectos que se encuentran en diferentes estadios de maduración. Desde el 2018, la empresa viene acometiendo un cambio en su estrategia de negocio aspirando    a convertirse en una empresa 100% renovable verticalmente integrada", afirma Fabeiro.

Y por parte del Gobierno de Aragón, Sergio Breto puso sobre la mesa que Aragón intenta llegar a los hitos que las nuevas normativas estatales marcan: "Tenemos 5.000 MW en eólica y fotovoltaica y están en tramitación otros 11.000. Desde principios del año 2020, cuando teníamos 8.689 MW funcionando en Aragón, hemos pasado a tener 8.840, pero hay que tener en cuenta la caída de los 1.101 MW de la central térmica de Andorra y que se han puesto en funcionamiento 1.291 MW de energía fotovoltaica más".

El potencial de Aragón

Diego Fabeiro. Director de Desarrollo de Activos de Capital Energy / Fernando Salvador. Director Regional de Aragón de Redexis

Aragón se nutre de la energía para crear las raíces de su futuro. Es una realidad que recoge el eslogan Aragón social, verde y digital, bajo el que entidades públicas y privadas trabajan juntas por alcanzar los nuevos objetivos. Sergio Breto, Director General de Energía y Minas del Gobierno de Aragón explica que "desde hace muchos años, Aragón se caracteriza por la extensión territorial, recursos renovables muy significativos, infraestructuras eléctricas siempre ampliables y que están en buen estado".

Una afirmación que constata José Antonio Pérez Cebrián, asesor estratégico de Forestalia, quien recuerda las palabras de Javier Lambán: "Aragón puede ser líder en España de las energías renovables". "Nosotros lo venimos diciendo desde hace 15 meses por muchos motivos: ubicación geográfica dentro de los cuatro polos de desarrollo españoles y con Francia a escasos kilómetros, territorio amplio y despoblado, horas de sol en España… Y en Europa ya se habla de que España será la gran suministradora de energía europea, lo que va a ser una revolución en cuanto al mercado de la energía".

En la ubicación aragonesa como un factor clave en el desarrollo de la comunidad incide Diego Fabeiro, director de Desarrollo de Activos e Infraestructuras de Capital Energy: "Su localización hace que grandes industriales que llegan desde el mundo de la logística, como Amazon o Inditex, se estén localizando en la comunidad. Disponer de una energía más barata ayudará a anclar otro tipo de industrias que podrían ejercer un efecto tractor sobre la economía de Aragón", comenta Deigo Fabeiro.

Sin embargo, toda la producción de energía deberá "verse acompasada de un crecimiento de la demanda que absorba esa generación", como defiende José Ignacio Lallana, Delegado en Aragón de Red Eléctrica. "Vamos a tener que desarrollar infraestructuras que permitan sacar esa generación a donde se consuma para no estrangular el desarrollo de la generación. Y tenemos que poner el foco en cómo tiene que evolucionar el consumidor para que sea más activo y realice una gestión más eficiente de la energía", explica Lallana.

El futuro es verde

Las energías verdes marcan la agenda de empresas, individuos y gobiernos desde hace años. Las fuentes renovables, materializadas en molinos, placas solares y un largo etcétera,    son cada vez más habituales en los territorios aragoneses. Y, además, ha quedado demostrado que la apuesta por las renovables interesa a grandes y pequeñas compañías con fuerte capacidad de inversión en el territorio aragonés.

Para    Diego    Fabeiro, ponente    de Capital    Energy    en el debate organizado por EL PERIÓDICO, Aragón es "un territorio especial en el sector de las renovables tanto por sus recursos como por su ubicación". "Hay pocas    regiones en España    que tengan una combinación de calidad del recurso eólico y solar como la que tiene la comunidad    aragonesa. Además, la ubicación es idónea al hacer de    nexo    entre    Cantábrico y    Mediterráneo    dando    servicio energético al País Vasco, Cataluña o Madrid, además de a Francia. Aragón puede proponerse contribuir de forma muy decisiva a la transición ecológica y justa de nuestra economía", constata Diego Fabeiro.

Todo ello se traduce en una oportunidad en el mercado de la energía. José Antonio Pérez Cebrián piensa que "la ventaja de ser muy activos y coger una cuota de mercado cuando los demás también la están buscando es que, si conseguimos ser líderes y tener volúmenes altos, el impacto de la energía influye en toda la economía". Además, el asesor estratégico de Forestalia incide en la energía como un eje transversal de la sociedad: "No nos podemos olvidar de que el sector agroalimentario que tenemos es líder y que puede avanzar y modernizarse gracias a que, en declaraciones de la ministra, tendremos la producción de energía más barata de Europa para el 2022 o el 2023. Si tenemos la energía suficiente, podremos volver a hablar algún día con los intensivistas de kilómetro 0 y de ventajas para los territorios que produzcan energía".

Sin embargo, antes de hablar de generación y consumo se deben afianzar las infraestructuras. Como ejemplificó José Ignacio Lallana, delegado de Red Eléctrica, "nadie se plantea montar una fábrica de lo que sea si luego no tienes capacidad de sacar esa producción allá donde se consume". "Claramente, las previsiones de desarrollo de generación energética en Aragón muestran que vamos a ser mucho más exportadores, y eso que llevamos muchos años siendo una comunidad exportadora de energía. Toda la generación que se va a implantar no va a verse acompasada de un crecimiento de la demanda que absorba esa generación. Por tanto, vamos a tener que desarrollar infraestructuras que permitan sacar esa generación a donde se consuma para no estrangular el desarrollo de la generación", explica Lallana.

La descarbonización

José Ignacio Lallana Domínguez. Delegado en Aragón de Red Eléctrica / Sergio Breto Asensio. Director General de Energía y Minas de la DGA / José Antonio Pérez Cebrián. Asesor estratégico de Forestalia

En un contexto de Transición Energética, Aragón afrontó en el pasado año 2020 su principal paso adelante hacia la producción de energía limpia: el cierre de la central térmica de Andorra. El proceso de descarbonización, con todas sus consecuencias sociales y económicas, supone un punto de no retorno y una apuesta sin reservas hacia las energías renovables.

José Antonio Pérez Cebrián, asesor estratégico de Forestalia, ve una oportunidad en ello para Aragón: "Creemos que el sector de las renovables puede ser uno que tenga tanta preponderancia como la agroalimentación, la nieve, el turismo o la logística". Explica que hasta el año 2030 hay que desarrollar 60.000 MW en España, y Aragón puede aspirar a tener el 20-25% del total. "Además, cuenta con el viento de cola a favor a nivel europeo y mundial con los fondos de la UE. El momento es idóneo y las comunidades autónomas que sean más agiles y más rápidas a la hora de tramitar y de defenderlo podrán tener un sector tractor que no podemos desaprovechar. Es la gran oportunidad", sentencia Pérez Cebrián.

Para Sergio Breto, Director General Energía y Minas del Gobierno de Aragón, la promoción de las renovables es "obligatoria por temas de descarbonización y cambio climático". "La búsqueda clave ha consistido en sacar el valor añadido al desarrollo de estas energías renovables. Seguramente, el camino más evidente, aparte de los beneficios a través de los impuestos que dejan en las arcas municipales, sea el compromiso de participación en la cadena de valor de las renovables. Es decir, contribuir en toda la industria asociada a las mismas como ya se hizo con el Decreto de la Energía eólica en Aragón, donde se buscaban unos compromisos voluntarios adicionales", asevera Breto.

No obstante, Diego Fabeiro cree que "debemos ser exigentes con las renovables". "Ya ha habido un proceso de maduración, son rentables económicamente y ahora debemos exigirles gestionabilidad: que sean productores de energía con garantías para poder avanzar en la senda de la descarbonización de la economía. Creo que los avances regulatorios de los últimos meses, que facilitan la tramitación de los sistemas de almacenamiento, así como la hibridación de tecnologías, van a generar mucho valor", afirma el director de Desarrollo de Activos e Infraestructuras de Capital Energy.

Sin embargo, no todo el futuro inmediato reside en las renovables. Como defiende Fernando Salvador, Director Regional de Aragón de Redexis, "no se puede descarbonizar la economía electrificando al 100% porque hay muchísimos recursos que no son electrificables". "Aragón no es consciente del potencial que tiene para la generación de biogás. Hay un informe del IDAE que dice que el 65% de todo el consumo de gas doméstico y comercial se podría sustituir por biogás producido en España. Si entre todos empujásemos para sacar esto como una oportunidad y generar energía de esos recursos, sería un gran apoyo para los medios rurales, para asentar a la población y descarbonizar la economía.

Y ello lo puntualiza José Ignacio Lallana, delegado de Red Eléctrica en Aragón, cuando dide que "en un contexto de transición energética verde, tiene que haber otros elementos que apoyen a la electricidad". "No hay que olvidar que para que el sistema eléctrico sea seguro, necesitamos una garantía de suministro que, probablemente, sea dada por el gas. Y cuanto más renovable sea ese gas, más verde será el sistema", concluye Lallana.

Desarrollo rural

A la vez que Aragón se lanza hacia los retos de la sostenibilidad, la digitalización o la descarbonización, una realidad persistente frena el progreso. Es la España Vacía, término acuñado por Sergio del Molino, que recoge el sentir y la problemática del medio rural, muy presente en la comunidad aragonesa y, sobre todo, en la provincia de Teruel. El impulso a las energías y su potencial en Aragón debe servir para revitalizar estas zonas despobladas.

Diego Fabeiro, director de Desarrollo de Activos e Infraestructuras de Capital Energy, cree que las renovables "van a ser un motor económico" para los pueblos. "Buscamos la creación de empleo local, verde y de calidad, y perseguimos impulsar el tejido empresarial en el ámbito rural, así como contribuir a su desarrollo social a través de nuestra Fundación. "Esta estrategia tendrá un efecto tractor adicional que dependerá de lo proactivas que sean las regiones a la hora de buscar soluciones imaginativas que atraigan a otro tipo de industrias", afirma Diego Fabeiro.

En palabras de José Antonio Pérez Cebrián, quien coincide con Fabeiro, las renovables "pueden aportar crecimiento, inversión, impuestos, empleos directos e indirectos, etcétera". Pero también apunta que "el desarrollo depende de los propios habitantes de esas zonas". El Asesor estratégico de Forestalia pone como ejemplo el sector agroalimentario: "Es tan potente (representa más del 10% del PIB aragonés), que el día que se haga una revolución con la aplicación de la energía limpia y la reducción de emisión de gases y descarbonización crearemos una demanda. Porque la demanda nunca se tiene; el futuro hay que crearlo. La energía unida a la digitalización, a lo que se suma el miedo a la concentración de las grandes ciudades generado por la pandemia, supondrá una vuelta a lo rural. Podemos impulsarla y ser actores de ayuda contra este problema de España".

José Ignacio Lallana, Delegado de Red Eléctrica, se suma a la idea de que la energía actuará como tractor de otras industrias: "Tenemos que buscar inversiones que sean productivas y tractoras de otras en el territorio. Desde nuestro punto de vista, la red de transporte lo es claramente con el tema de la generación, ya que posibilita hablar de los números que se van a desarrollar porque si no sería imposible evacuarlos. Hablamos de los dos extremos de la cadena, creo que la generación ha cogido ya ritmo y va lanzada, por lo que la parte del consumo es la que tiene ahora potencialidad y hay que ver hacia dónde se desarrolla", explica Lallana.

El gas renovable

La energía renovable pasa por muchos vectores y, aunque el futuro es la electrificación, las opciones intermedias brindan un apoyo incuestionable para lograr los objetivos verdes. Fernando Salvador, Director Regional de Aragón de Redexis cree que Aragón "debe ser pionero en la implementación del hidrógeno". "El hidrógeno se puede usar para almacenamiento, ya que es posible utilizar una parte del hidrógeno para inyectarlo en la red de gas natural, y es la única manera, junto al biogás y el biometano, que existe para descarbonizar los procesos térmicos", afirma el representante de Redexis en el foro.

Además del uso directo en la conversión de energía, el hidrógeno se está implementando ya en multitud de ámbitos como la movilidad y el transporte. Fernando Salvador explica que comunidades autónomas como Cataluña o Baleares ya tienen proyectos reales con sus respectivas EMT, las cuales cuentan con entre 10 y 15 autobuses impulsados por hidrógeno en sus flotas. "En estos tiempos hay que ser pioneros y ojalá Aragón apueste por tener alguna línea de hidrógeno que nos permita explorar estas oportunidades", concluye Salvador.

A todo ello, Sergio Breto,    Director General Energía y Minas del Gobierno de Aragón,    añade que Aragón es "un foco en el sector del automóvil". "La Fundación del Hidrógeno está llevando a cabo muchos proyectos y, francamente, el hidrógeno puede ser el modulador del parque de generación de renovables que se está induciendo". Puntualiza Diego Fabeiro que el hidrógeno "dará seguridad al suministro eléctrico hasta que tengamos una madurez del sistema de funcionamiento renovable. Ahí estará el gas apoyando y favoreciendo el desarrollo de la eólica y la fotovoltaica. Y cuanto más renovable sea ese gas, mejor mix generador tendremos. El ejemplo es cercano. Fernando Salvador, de Redexis, recordó cómo con la borrasca Filomena la generación de las renovables cayó a mínimos y las tecnologías de respaldo como el gas tuvieron que entrar en funcionamiento.

En cuanto a la movilidad, José Ignacio Lallana recalca que "solo hay que ver las estadísticas de coches vendidos". "Son transiciones que van despacio, pero que tienen un punto de avance claro y de no retorno.    Es un elemento más de la transición energética", afirma. Y a ello se suma Fernando Salvador, de Redexis, remarcando que "la electrificación no es una solución 100% para todo el transporte, con el ejemplo de los vehículos pesados". "Para descarbonizarlos no hay otra alternativa que el gas renovable. Aragón debe apostar por esto", subraya Salvador explicando que el consumo de hidrógeno en sus dos gasideras de Zaragoza ha superado ya en un 30% sus expectativas, aun con el año de la pandemia de por medio.

En este contexto, Diego Fabeiro asegura que "Capital Energy apuesta por el hidrógeno verde como vehículo para contribuir a la descarbonización de la sociedad, en el marco de su compromiso con la lucha contra el cambio climático y el desarrollo sostenible. Su utilización será clave para disminuir progresivamente el peso que siguen teniendo hoy las plantas de combustibles fósiles como el carbón y el gas natural".